A principios de esta semana la cantante Taylor Swift, pues el hombre que fue varias veces a su apartamento de Nueva York, Mohammed Jaffar, fue arrestado por la policía y tendrá que pagar una fianza de 20.000 dólares, además de mantenerse alejado de la intérprete de ‘Blank Space’, según la orden de alejamiento impuesta por el juez..

Jaffar comenzó a visitar el domicilio de la artista, situado en el famoso barrio de Tribeca, el pasado diciembre con intención de conocer a su ídolo y no recibió respuesta, pero su obsesión lo llevó a volver una y otra vez, apareciendo el 15 de febrero por última vez a las puertas de la vivienda.

Según la columna Page Six del diario New York Post, Jaffar llamó al timbre de Taylor Swift durante más de una hora para intentar llamar su atención, y al no conseguirlo, volvió al día siguiente y repitió la misma acción durante 45 minutos.

Después de varios intentos fallidos Mohammed Jaffar consiguió entrar en el edificio, como recogen las grabaciones de las cámaras de seguridad del lujoso bloque -donde también viven Orlando Bloom y el director Steven Soderbergh- aunque se desconoce si llegó a interactuar con Taylor y la forma en que accedió a las instalaciones.

Según los documentos legales en poder del citado periódico, también se subió al tejado del edificio desde las 10 de la mañana hasta las 2 de la tarde.
Al margen de sus inquietantes visitas, los asistentes de Taylor Swift han denunciado haber recibido 59 llamadas de Mohammed Jaffar, cuyo propósito no era otro que el de poder encontrarse cara a cara con la popular artista.

Como buena estrella del pop, no es la primera vez que Swift tiene que lidiar con acosadores.

Sin ir más lejos, el pasado noviembre otro hombre fue detenido en Texas por perseguirle a ella y su equipo después de dar un concierto, situándose muy cerca de la caravana de coches con intención de «conseguir una foto con ella y acompañarla todo lo posible».