Puede que el nombre Adam Wiles no resulte familiar, pero casi todo el mundo ha oído hablar alguna vez de Calvin Harris y resulta que ambos son la misma persona.

Cualquier fan que tenga la suerte de conocer en persona al DJ debería tener mucho cuidado y cerciorarse de que se refiere a él en todo momento como Adam, ya que es la única manera de obtener una respuesta.

La razón de que así sea es que su alias artístico nunca ha sido de su agrado, sobre todo desde que todo el mundo parece haber olvidado que debía ser solo un seudónimo que se utilizara en su vida profesional.

«En realidad nadie me llama Calvin. Es terrible y ni siquiera es mi nombre. En los inicios de mi carrera, cuando conocía a alguien por primera vez y me llamaba así por error, lo dejaba pasar porque en el fondo era una especie de alias», explicó el reconocido DJ.

Sin embargo, según fue evolucionando su carrera y aumentando su fama, ese error comenzó a repetirse más y más a menudo, hasta que acabó teniendo la sensación de haber sido sustituido por otra persona.

«Al final tuve que decir: ‘Lo siento, pero esto es ridículo. Estás hablando con mi álter ego’. Desde ese día he cambiado de actitud, no me importa que alguien crea que es un apodo o cualquier otra cosa, ese no es mi nombre. No me llamo Calvin Harris», concluyó el músico.