Altos funcionarios estadounidenses, citados por The New York Times, dicen que la inteligencia de Estados Unidos en Ucrania ha incidido en el ataque a los generales rusos en la guerra y, en consecuencia, en sus fallecimientos. Según las cifras otorgadas por las autoridades ucranianas, han muerto cerca de doce generales.

El portavoz del Pentágono, John Kirby, reconoció que Estados Unidos estaba proporcionando “a Ucrania información e inteligencia que pueden usar para defenderse”, aunque Adrienne Watson, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, dijo que la inteligencia no se proporcionó “con la intención de matar a los generales rusos”.

Sin embargo, se sabe que, según lo documentó el diario estadounidense, “Estados Unidos se ha encargado de proporcionar la ubicación y otros detalles sobre el cuartel general móvil del Ejército ruso, que se reubica con frecuencia. Los funcionarios ucranianos han combinado esa información geográfica con su propia inteligencia, incluidas las comunicaciones interceptadas que alertan al Ejército ucraniano sobre la presencia de altos oficiales rusos, para realizar ataques de artillería y otros ataques que han matado a oficiales rusos”. Este apoyo en inteligencia hace parte del paquete de ayuda que el país norteamericano ha autorizado en el marco de la guerra, incluyendo $US 20.000 millones en armas.

The New York Times informó que la administración Joe Biden había tratado de mantener en secreto gran parte de la inteligencia para evitar provocar a Vladimir Putin en una guerra más amplia. Ese cálculo parece haber cambiado en las últimas semanas, ya que los países expresaron su apoyo abierto a Ucrania y suministraron equipos mucho más letales, incluida la artillería y las municiones que se necesitan.