Bruce Springsteen canceló el viernes un concierto en Carolina del Norte para protestar por una ley que apunta a las personas transgénero, y prometió luchar contra los que «siguen yendo contracorriente».

La decisión de Springsteen es una de las acciones de más alto perfil contra esta ley, que prohíbe a las localidades de Carolina del Norte (EE.UU) aprobar sus propias leyes antidiscriminatorias y obliga a las personas a utilizar los baños públicos de acuerdo a su sexo de nacimiento.

«A mi juicio, es un intento de las personas que no pueden soportar el progreso que nuestro país ha hecho reconociendo los derechos humanos de todos nuestros ciudadanos«, dijo la leyenda del rock en un comunicado.

«Algunas cosas son más importantes que un concierto de rock y esta lucha contra el prejuicio y la intolerancia, que está ocurriendo mientras escribo, es una de ellas«.

«Es el medio más potente del que dispongo para alzar mi voz contra quienes siguen yendo contracorriente en lugar de hacia adelante», añadió.

Bruce Springsteen iba a tocar el domingo en Greensboro, en Carolina del Norte, como parte de una gira con entradas agotadas en la que el cantante revisita el clásico álbum de 1980 «The River».

El artista, de 66 años, ganó fama con sus historias sobre las luchas de la clase trabajadora estadounidense y sus maratónicos conciertos.

En la última década ha sido más abierto sobre sus ideales políticos e hizo campaña por el presidente Barack Obama y otros demócratas.

En la protesta contra esta ley, el gigante de los pagos en línea Paypal abandonó una inversión de 3,6 millones de dólares que planeaba hacer en Charlotte, en el mismo estado, y que iba a emplear a 400 personas.

Los gobernadores de Nueva York y Washington, así como muchos líderes locales, prohibieron a sus funcionarios públicos hacer viajes no fundamentales a Carolina del Norte.

El gobernador de Carolina del Norte, Pat McCrory, firmó la ley el mes pasado, luego de que fuera aprobada por el legislativo local, en respuesta a una ordenanza antidiscriminatoria que había sido aprobada en Charlotte, la mayor ciudad del estado.

La ley, conocida como HB2, requiere que las personas transgénero usen los baños públicos de acuerdo a su sexo de nacimiento.