La Casa Blanca tiene hoy como huésped al presidente más viejo que ha asumido el cargo. Donald Trump cumple hoy 71 años y, de acuerdo con cifras publicadas, es el que con más años ha llegado al poder. Antes de él el récord lo tenía Ronald Reagan, quien tomó posesión del cargo en 1981, cuando estaba a punto de cumplir los 70 años.

Pues este miércoles es día de fiesta en la Casa Blanca. Una fiesta medio amarga si se revisa sólo el último mes de la presidencia de Trump. Mayo fue, de lejos, una de las épocas más convulsas para Trump: destituyó al director del FBI (con las conocidas consecuencias), comenzaron las audiencias en el Senado para aclarar la participación rusas en las elecciones que lo llevaron al poder, compartió información secreta con Rusia y retiró al país del Acuerdo de París.

También hizo su primera gira internacional que terminó erosionando las relaciones con varios países europeos. Junio no ha sido diferente, pues el presidente sigue el libreto.

Por eso, lo que haga Melania, su esposa, este día puede salvar la fiesta. Trump cumple 71 años y su esposa les pidió a los simpatizantes del presidente firmar una carta «inolvidable» con motivo de su 71 cumpleaños.

«El 14 de junio, el presidente Trump cumplirá 71 años, y necesito tu ayuda para que este aniversario sea inolvidable para mi marido», escribió en un correo electrónico a sus partidarios la primera dama de Estados Unidos, de 47 años.

«Tú has demostrado ser un amigo leal de mi marido», dice Melania a los simpatizantes de Trump y a los militantes del partido republicano, a los que pide firmar en línea una carta antes de las 21H00 del 14 de junio.

«Amigo, Donald estará feliz de saber de amigos como tú, que significan mucho para él y para la victoria del partido», agrega.

La ex primera dama Michelle Obama convocaba también la participación de los militantes para festejar el cumpleaños de su marido Barack.

La carta fue publicada por Melania Trump el mismo día que tuvo lugar una audiencia muy esperada del ex jefe del FBI James Comey para explicar los detalles de su despido por parte de Trump y cómo ha vivido las presiones del presidente respecto a «dejar tranquilo» a uno de sus asesores vinculado al caso ruso.

Melania en la Casa Blanca

Se espera que la llegada de la esposa y su hijo, Baron, a la Casa Blanca ayuden al magnate a sobrellevar la soledad en la que vive. Según los medios de comunicación, Trump duerme poco (cuatro horas), ve mucha televisión, come comida chatarra y twitea como loco. Quizas, explican analistas en el New York Times, por culpa de la soledad.

Con la familia en la casa (esposa e hijo porque su hija Ivanka asumió un papel muy particular y tiene oficia en la sala este de la residencia oficial) se espera que bajen los gastos que generaba cuidar a Melania y Baron en la Torre Trump en Nueva York y el presidente sea menos impulsivo. Aunque la mudanza se había anticipado para el miércoles, día del 71 cumpleaños del mandatario estadounidense, se oficializó el domingo.

The Politico explicaba la demora de 143 días de la Primera Dama en llegar a la Casa Blanca. Y más allá de razones políticas, determinaron que era por el colegio de su hijo de once años. Dice Politico que Melania es discreta, pero no es reticente a asumir su papel. Con el cumpleaños de Trump llega una nueva etapa para Melania y solo queda esperar, después de la fiesta, en qué centrará su actividad pública.