El Vaticano levantó la inmunidad diplomática del nuncio apostólico en Francia, monseñor Luigi Ventura, quien es investigado por presuntas «agresiones sexuales». Ventura, de 74 años, es acusado por al menos cuatro hombres de agresión sexual. Tres de los demandantes afirman que el nuncio les manoseó. La noticia la confirmó el director interino de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Alessandro Gisotti.

“Puedo confirmar que la Santa Sede renuncia a la inmunidad jurisdiccional de la que goza el Nuncio Apostólico en Francia, Mons. Luigi Ventura, en virtud de la Convención de Viena del 18 de abril de 1961 sobre las relaciones diplomáticas, en vistas de los procedimientos penales que se le siguen”, dijo Gisotti. El Ministerio de Francés de Relaciones Exteriores confirmó la pérdida de inmunidad del nuncio debido a este caso. La Fiscalía francesa solicitó el pasado marzo que se le retirase la inmunidad diplomática y su petición se tramitó a través del Ministerio de Justicia y el de Exteriores, que fue quien hizo la comunicación final a la Santa Sede.

Ventura declaró en abril ante la policía francesa, a pedido de él, según una fuente judicial. La primera denuncia salió a la luz en febrero, después de que un hombre de unos 30 años afirmara que Ventura le manoseó las nalgas durante una ceremonia en el ayuntamiento de París, el 17 de enero. Poco después, otros dos hombres denunciaron hechos idénticos que se habrían producido entre 2018 y 2019. Un cuarto hombre presentó una denuncia contra Ventura un tiempo después. En total, ya van seis denuncias de agresión sexual que enredan a Ventura.

Dos de estos supuestos hechos presuntamente tuvieron lugar en enero de 2018 y de 2019 en el Ayuntamiento de París, durante la tradicional recepción que la alcaldesa, Anne Hidalgo, ofrece al cuerpo diplomático con motivo del Año Nuevo.

El monseñor Ventura es un diplomático de carrera del Vaticano que ejerce como representante diplomático de la Santa Sede en Francia desde 2009. Antes, fue cura en la nunciatura de Brasil, Bolivia y Reino Unido, tras lo cual fue nombrado secretario de Estado en Roma. Doctor en Letras Modernas y licenciado en Derecho Canónico, Ventura, de 74 años, entró en el servicio diplomático vaticano en 1978 y fue nuncio apostólico en Costa de Marfil, Burkina Faso o Níger, antes de ser enviado en 1999 a Chile, puesto que ocupó dos años, antes de partir a Canadá. Gracias a su función de nuncio apostólico, los embajadores del Vaticano gozan de inmunidad diplomática y no puede ser forzado a presentarse a ofrecer testimonio ante la justicia.

«(Esta) se trata de una medida extraordinaria que confirma la voluntad expresada por el propio nuncio desde el principio del caso de colaborar plenamente y de forma voluntaria con las autoridades judiciales francesas competentes», dijo un portavoz de la Santa Sede.