Este domingo las habitantes de la ciudad de Varela, estado Trujillo, no aguantaron más las constantes interrupciones en el fluido eléctrico que ya han averiado sus electrodomésticos y dañado los pocos alimentos que pueden comprar.

Coropelec, empresa encargada del suministro eléctrico, no se ha pronunciado desde que el racionamiento eléctrico, que inicialmente era de dos horas, se convirtió en interrupciones de entre seis a veinticuatro horas seguidas, sin ningún aviso a los pobladores.

Al medio día de este domingo, las arengas se hicieron escuchar y se extendieron por otras ciudades del mismo estado. Según el medio digital venezolano caraotadigital.net, cerca de la residencia del gobernador Henry Rangel Silva se registraron protestas que incluyeron saqueos a centros comerciales.

El estado Zulia también es otra región donde la falta de electricidad ha empezado a afectar las comunicaciones y las actividades en centros hospitalarios. Y es que ya son quince días seguidos, según dicho portal, en que los habitantes de varias zonas de esta región sufren de recortes y bajones de luz constantes sin ninguna respuesta de las autoridades.

El metro de Maracaibo se ha quedado sin funcionamiento, en varias instituciones educativas han tenido que cancelar clases y el servicio de internet está totalmente colapsado. La situación más grave la viven los pacientes de diálisis quienes no pueden recibir sus tratamientos.