El presidente Barack Obama rindió homenaje este lunes a los caídos en las guerras y dijo que el país «nunca debe dejar de tratar de pagarles completamente» por sus sacrificios.

Hizo notar también que es la primera vez en 14 años que se celebra el Día de los Caídos en las Guerras sin que la infantería estadounidense esté combatiendo en algún conflicto de gran envergadura.

Bajo un cielo despejado ante unas 5.000 personas en el Cementerio Nacional de Arlington, incluidos parientes de los difuntos, Obama dijo que ese panteón es «algo más que el lugar de descanso final de los héroes».

«Es un reflejo de Estados Unidos. Un reflejo de nuestra historia, de las guerras que hemos librado por la democracia, la paz para preservarla», dijo. «Refleja nuestra diversidad, de personas de distintas razas y credos que lucharon por los ideales que nos unen como nación».

Todos los presidentes concurren en este día al cementerio situado entre las colinas que se alzan sobre el río Potomac. Esta vez coincidió con la reducción de efectivos en Afganistán a unos 10.000 después de haber alcanzado un pico de 100.000. También se produjo con el trasfondo de un esfuerzo complejo encabezado por Estados Unidos  para ayudar a Irak a derrotar al grupo extremista Estado Islámico, que ha tomado Ramadi en territorio iraquí y Palmira en la vecina Siria.

El mandatario no mencionó la participación estadounidense al lado de otras naciones en un esfuerzo por detener al Estado Islámico. Dichos esfuerzos han sido fuertemente criticados desde la caída de Ramadi, y los legisladores han pedido una mayor presencia de efectivos estadounidenses en el lugar, incluidas tropas de infantería.

El vicepresidente Joe Biden habló el lunes con el primer ministro iraquí, Haider al-Abadi, y prometió apoyo total de Estados Unidos a los esfuerzos de Irak para recuperar el territorio que controla el Estado Islámico, incluida la aceleración de envío de entrenamiento y equipo estadounidense al lugar, señaló la Casa Blanca.

El secretario de Defensa, Ash Carter, dijo el domingo en una entrevista transmitida a nivel nacional que las fuerzas iraquíes «no mostraron deseo alguno de combatir» y huyeron ante los avances del Estado Islámico sobre Ramadi. La Casa Blanca aclaró en un comunicado que la llamada de Biden «reconoció el enorme sacrificio y valentía de las fuerzas iraquíes durante los últimos 18 meses en Ramadi y otros sitios».

En sus declaraciones en Arlington, Obama dijo que la mayoría de las tropas deberán salir de Afganistán hacia finales de 2016.

El día incluye homenajes y desfiles en todo el país. Por la mañana, el mandatario desayunó con representantes de organizaciones de veteranos y familiares de militares en actividad, y para la tarde estaba previsto un desfile en el centro de Washington.

Obama dijo que la mayoría de los estadounidenses no comprenden el sacrificio que realiza el 1% de la población que sirve en las fuerzas armadas. Pero cuando se reúne con las familias «de Estrella Dorada» que han perdido a parientes en su servicio a través de las armas, el mandatario escucha «su orgullo a través de sus lágrimas».