El presidente de EE.UU., Donald Trump, pidió al Pentágono que organice un desfile militar en el país, el primero desde 1991, informó este miércoles la Casa Blanca.

Trump «ha pedido al Pentágono que explore una celebración en la que todos los estadounidenses puedan mostrar su agradecimiento (a los militares)», dijo la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders.

Un portavoz del Pentágono, Charlie Summers, explicó a la CNN que el proceso de planificación está en sus «inicios» y que apenas se está «examinando potenciales fechas» para el desfile.

Según The Washington Post,  el primero en reportar sobre la orden presidencial, Trump quiere un desfile elaborado con tanques y soldados que marchen.

Estados Unidos no organiza un desfile militar a gran escala desde junio de 1991, después de ganar la primera Guerra del Golfo y con George Bush padre en la Casa Blanca.

En esa ocasión, 8.800 militares desfilaron por el centro de Washington atrayendo a unos 200.000 espectadores, según The Washington Post.

De hecho, los desfiles militares a gran escala en Estados Unidos son algo poco habitual y reservados a celebraciones postbélicas.

Los hubo después de la guerra civil estadounidense, en 1865; una vez finalizada la Primera Guerra Mundial en 1919 y también en 1946, después de la Segunda Guerra Mundial.

Cuando EE.UU. retiró sus tropas de Irak en 2011, el Gobierno de Barack Obama no quiso organizar un desfile porque la guerra de Afganistán seguía su curso y había vidas estadounidenses en riesgo.

Tampoco los hubo después de las guerras en Corea y Vietnam, ya que Estados Unidos no salió vencedor de esos escenarios.

El Post informó que una reunión del 18 de enero entre Trump, el secretario de la Defensa Jim Mattis y los principales generales del Pentágono marcó un punto de inflexión en el impulso de Trump para realizar un desfile.

El diario publicó declaraciones de un oficial castrense, cuya identidad no se dio a conocer, que dijo: «Las órdenes de marcha fueron: quiero un desfile como el de Francia». Ello fue interpretado como una orden presidencial, señaló el Post. Tras haber asistido al tradicional desfile militar en la avenida de los Campos Elíseos de París, el presidente de Estados Unidos quedó impresionado y mostró su intención de hacer algo similar en su país.

El costo de trasladar tanques y demás equipo militar a Washington sería de millones de dólares, de acuerdo con el reporte.