Turquía rechazó las condolencias que le dio Estados Unidos el lunes con motivo del atentado registrado el domingo en el centro de Estambul.

El ataque con bomba en una concurrida calle de la ciudad dejó seis personas muertas y otras 81 heridas, y se le atribuye a los combatientes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).

“No aceptamos el mensaje de condolencias de la embajada de Estados Unidos. Lo rechazamos. Nuestra alianza con un Estado que apoya a Kobane (localidad al norte de Siria) y a sus focos de terror (…) debe ser discutida”, dijo el ministro del Interior turco, Suleyman Soylu.

Turquía, vale la pena recordar, ha acusado a Estados Unidos de proveer de armas a los combatientes kurdos del PKK y de las Unidades de Protección Popular (YPG), que Ankara considera como grupos “terroristas” y ramas regionales de la misma organización.

Aunque Estados Unidos y la Unión Europea consideran a estas organizaciones como entes independientes, solo tienen designado como terrorista al PKK.

El YPG, por otro lado, ha sido aliada de Estados Unidos en la lucha contra el Estado Islámico (Daesh) en Siria.

Vale la pena recordar que la policía turca anunció que la joven detenida, acusada de haber colocado la bomba, es de nacionalidad siria.

Según la autoridad, la detenida reconoció los hechos y dijo que actuó “bajo órdenes del PKK” y afirmó que recibió directivas desde Kobane.

Reunión entre Erdogan y Biden

En medio de esta coyuntura, los presidentes de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y de Estados Unidos, Joe Biden, se reunieron el martes en el marco de la cumbre G20 en Bali, Indonesia.

Según la agencia turca Anadolu, se trataron “temas bilaterales y regionales”, en tanto que la Casa Blanca informó que Biden ofreció sus condolencias por el atentado y dejó claro que Estados Unidos está del lado de Turquía, aliado de la OTAN.

Asimismo, el mandatario estadounidense agradeció a Turquía sus esfuerzos para abrir el corredor que permite exportar grano ucraniano por el Mar Negro, que expira el 19 de noviembre, plazo que se intenta posponer desde Bali.