Ya se jugaron 32 de los 64 partidos de Catar 2022. Fue la etapa de calentamiento, porque la verdadera Copa del Mundo comienza hoy, con la tercera y definitiva fecha de los grupos A y B. En los próximos cuatro días la mitad de las 32 selecciones regresarán a casa, unas con la satisfacción de haber cumplido y otras con la amargura de quedar por debajo de las expectativas. No hay más margen de error.

Con el duelo Portugal-Uruguay, en el espectacular estadio de Lusail, que será sede de la final el 18 de diciembre, todos los equipos completaron dos presentaciones y hay mayores argumentos para hacer balances.

Ante 88.668 personas, la mejor entrada hasta ahora, Portugal le ganó 2-0 a Uruguay, con momentos de brillantez de Bruno Fernandes y Bernardo Silva. De los charrúas, para rescatar, el excelente nivel de Federico Valverde, un verdadero todoterreno.

En ese duelo se presentó el único incidente reprochable hasta ahora. Un aficionado ingresó a la cancha cuando se jugaba la segunda parte con una bandera arcoíris, distintiva de la comunidad LGTBI, y un letrero que decía “Salven a Ucrania”. En apenas un par de segundos fue neutralizado por las autoridades.

Portugal se clasificó al llegar a seis puntos y con Cristiano Ronaldo, primer futbolista en marcar en cinco Mundiales, sigue aspirando a ser gran protagonista. Sin embargo, Francia, el campeón defensor, es el equipo que se ve más sólido, con dos convincentes victorias sobre Australia y Dinamarca. No brilló, pero demostró por qué es nuevamente candidata al título, con Kylian Mbappé motivado y concentrado, además de un colectivo que lo respalda siendo confiable tanto en defensa como en ataque.

España es una selección interesantísima, que de la mano de Luis Enrique se la jugó por la renovación, y con muchos jóvenes ya enfrenta mano a mano a cualquiera, con una propuesta arriesgada. Por su parte, Inglaterra impresionó en su estreno, pero dejó algunas dudas contra Estados Unidos. Tiene, no obstante, un plantel de respeto, con buenas variantes.

Argentina, que decepcionó en el segundo tiempo frente a Arabia Saudita y en buena parte del duelo contra México, resucitó con los goles de Lionel Messi y Enzo Fernández, pero sigue siendo una incertidumbre. Y Brasil, de pasajes muy buenos ante Serbia, contra Suiza, sin Neymar, se vio confundido y sin ideas.

Aunque en el aspecto futbolístico las expectativas que había sobre el equipo local no eran altas, Catar decepcionó. Sobre todo porque no mostró resistencia ante Ecuador y Senegal, aparentemente los rivales menos fuertes que tenía.

En ese grupo, el A, Países Bajos no ha jugado bien, aunque tiene plantel para hacerlo. Al igual que Bélgica, que cayó ante Marruecos y despertó sus fantasmas de siempre: gran plantel, pero falta de jerarquía. Su verdugo africano es probablemente la revelación del torneo. Igualó sin goles ante Croacia, subcampeona del mundo, y luego venció a Bélgica. Frente a Canadá podría asegurar el primer lugar del grupo.

Catar 2022 se escucha: El Espectador a rueda, un pódcast en el que le seguimos la pista al Mundial

Ecuador se juega este martes la clasificación contra Senegal, pero sea cual sea el resultado, cumplió. Venció en la inauguración a los locales y mereció más que un empate frente a Países Bajos. La Costa Rica de Luis Fernando Suárez sufrió la peor goleada hasta el momento, pero se supo recuperar y le ganó a Japón, que había dado una de las sorpresas de la primera fecha al derrotar a Alemania, que a pesar del mal comienzo sigue dependiendo de sí misma y espera vencer por varios goles al combinado tico. Sin mucho ruido, Croacia, de la mano de Luka Modric, ha demostrado buen nivel.

En la primera mitad del Mundial no se han presentado novedades tácticas. La mayoría de los equipos hacen defensa de cuatro e incluso de cinco. Tampoco utilizan un enganche o creativo, prefieren poner volantes de ida y vuelta. Sí, en cambio, llama la atención la irregularidad de los equipos, tanto altibajo. Puede ser la falta de trabajo en conjunto, pues la mayoría de los planteles se reunieron apenas una semana antes del inicio del torneo, por lo que dependen del buen momento de sus individualidades.

El VAR cambió el juego. Todos los partidos, en promedio, han durado más de 100 minutos debido a la utilización de esa herramienta efectiva, justa, pero todavía con detalles para mejorar y aplicar correctamente.

La organización, muy correcta. Pasada la primera semana ya se ajustaron algunos detalles logísticos, como llegadas y salidas de los estadios, así como flujos de turistas en los sitios más emblemáticos de Doha. Catar pasa el examen con nota destacada.