La Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados de Chile aprobó este miércoles un proyecto de ley para permitir el aborto en caso de inviabilidad del feto, riesgo para la vida de la madre y violación, lo que deja el documento a un paso de su votación.

El proyecto, que navega en el Congreso desde hace un año, cuando la presidenta Michelle Bachelet lo presentó, desafiando a la ultraderecha y la Iglesia Católica -con gran influencia en Chile-, pasará ahora a la Comisión de Hacienda, y se espera que la próxima semana sea tratada en sala.

«Es un paso muy importante porque ya se va a ver en sala, lo que significa un gran triunfo para nosotros», dijo a la AFP Claudia Dides, del Movimiento por la Interrupción Legal del Embarazo.

Por su parte, la ministra del Servicio Nacional de la Mujer, Claudia Pascual, dijo que el proyecto «no va a imponer a ninguna mujer qué decisión tomar». «Queremos manifestar que es un tremendo avance para el país poder contar con las alternativas (tres casos), con las prestaciones de salud y también con un acompañamiento para la mujer», añadió.

El caso de violación fue el que más polémica desató y en el que el proyecto sufrió modificaciones en la Comisión, como la introducción de que «cuando la mujer sea mayor de 18 años, y esta no haya denunciado el delito de violación, los jefes del establecimiento hospitalario o clínica particular deberán poner en conocimiento del Ministerio Público dicho delito» y brindarle a la víctima un programa de acompañamiento.

Chile, junto con El Salvador, Nicaragua y Malta son los únicos países del mundo en los que la interrupción del embarazo no está permitida bajo ninguna circunstancia.

Esta es una de las herencias de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), ya que hasta 1989 y por más de 50 años el aborto estuvo permitido en Chile para casos de peligro de muerte de la madre o inviabilidad del feto.

El gobierno cuenta con mayoría en ambas Cámaras, pero algunos legisladores de la oficialista Democracia Cristiana han mostrado sus reparos sobre el proyecto.

No obstante, se espera que se llegue a los votos necesarios y que los legisladores independientes se sumen a la iniciativa.