Un total de 1995 niños y menores de edad fueron separados de sus familias inmigrantes en apenas seis semanas en la frontera con México, informó este viernes una fuente del Departamento de Seguridad Interior estadounidense.

Entre el 19 de abril y el 31 de mayo de este año, esos niños y menores de edad fueron separados de unos 1.940 familiares adultos, quienes se encuentran arrestados en espera de un proceso por ingresar clandestinamente al país, dijo el portavoz de la cartera a periodistas.

Hace apenas ocho días Reuters informaba que 1.800 familias inmigrantes fueron separadas en la frontera entre México y Estados Unidos desde octubre de 2016 hasta febrero de este año, según un alto funcionario del gobierno, porque el presidente Donald Trump implementó políticas más estrictas en la frontera.

En mayo, el fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, anunció una política de “tolerancia cero” por la que todos los detenidos que ingresen ilegalmente a Estados Unidos serán acusados penalmente, lo que generalmente lleva a que los niños sean separados de sus padres.

«Un funcionario de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos había testificado el mes pasado ante el Congreso que entre el 6 de mayo y el 19 de mayo, 658 niños fueron separados de 638 padres debido a los procesamientos», informaba Reuters.

La declaración lleva el total de las separaciones oficialmente reconocidas a más de 2.400, pero eso no incluye las últimas semanas o el período comprendido entre el 1 de marzo y el 6 de mayo.

Inmigrantes y defensores de los niños, legisladores demócratas y la ONU han condenado la práctica de separar familias en la frontera, pero el gobierno ha defendido sus medidas argumentando que está protegiendo a los niños y dejando claro que los que cruzan la frontera de forma ilegal serán procesados independientemente de sus circunstancias familiares.

Según un informe de la agencia Efe, entre el 19 de abril y el 31 de mayo, un total de 1.995 menores de 18 años fueron separados de los familiares adultos que les acompañaban, de acuerdo con datos del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés).

Estos niños fueron separados por entrada por vías ilegales al país, violaciones de las normas migratorias o posibles conductas criminales de los adultos.

De acuerdo con un artículo de The New York Times desde octubre más de 700 niños han sido apartados de los adultos que declararon ser sus padres, incluyendo a más de 100 niños menores de cuatro años.

«Los datos fueron presentados por la Oficina de Reubicación de Refugiados, parte del Departamento de Salud y Servicios Humanos, que toma bajo su custodia a los niños que se les han quitado a los padres inmigrantes. Altos funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional, que se encarga de los trámites de los migrantes en la frontera, negaron inicialmente que la cantidad fuera tan grande. Sin embargo, después de que el número fue confirmado a The Times por tres funcionarios federales que trabajan de cerca en estos casos, las agencias aceptaron el viernes en una declaración conjunta que eran aproximadamente 700”, decía el diario.