Los demócratas confirmaron este martes a Joe Biden como candidato a la Presidencia de Estados Unidos, de cara a los comicios del próximo del 3 de noviembre, en una votación que transcurrió de manera telemática debido a la pandemia de coronavirus.

En un resultado más que previsible, la candidatura del que fuera el vicepresidente de Barack Obama (2009-2017) fue oficializada con el apoyo de 3.558 delegados frente a los 1.151 que obtuvo su rival en las primarias, el senador izquierdista Bernie Sanders.

Resulta que las reglas de la convención dictan que el candidato rival, en este caso, Bernie Sanders debe recibir los votos que ganó durante las primarias para la nominación. La congresista neoyorquina Alexandria Ocasio-Cortez fue la encargada de nominarlo, lo que para muchos fue un acto confuso.

Las redes explotaron exigiéndole respaldar a Joe Biden en este momento clave para el país, por lo que Ocasio-Cortez aclaró en redes que sus palabras no fueron un ataque al candidato presidencial.

El discurso de Ocasio-Cortez había sido objeto de numerosos comentarios en las redes y medios de comunicación durante los días previos dado que el partido tan solo asignó 60 segundos a la popular congresista, aunque finalmente utilizó un minuto y medio, y provocó que muchos tildaran que sus palabras no demostraban la unidad que el partido demócrata quería proyectar.

¿Qué dijo Ocasio-Cortez?

Ocasio-Cortez se declaró «en fidelidad y gratitud a un movimiento popular de masas que trabaja para instaurar los derechos sociales, económicos y humanos del siglo XXI, incluida la atención médica garantizada, educación superior, salarios dignos y derechos laborales para todos».

«Un movimiento que se da cuenta de la brutalidad insostenible de una economía que recompensa las explosivas desigualdades de riqueza para unos pocos a expensas de la estabilidad a largo plazo para muchos», dijo.

“Un movimiento -añadió- que se esfuerza por reconocer y reparar las heridas de la injusticia racial, la colonización, la misoginia y la homofobia, por proponer y construir sistemas reinventados de inmigración y una política exterior que rechace la violencia y la xenofobia de nuestro pasado”.

Este fue uno de los discursos más esperados de la cita política demócrata, y que, de acuerdo con analistas de medios locales, envía un poderoso mensaje a Biden: hacer un cambio en el sistema sin olvidar a quienes se han movilizado para lograrlo. The Washington Post señala que la congresista le dejó claro al partido que ese sector que ella representa “no puede ser ignorado”.

“Tenemos que aprovechar nuestra membresía de una manera que obtengamos concesiones de la Casa Blanca de Joe Biden en temas como la reforma de la justicia penal y la atención médica”, dijo Mondaire Jones, quien ganó las primarias en el Distrito 17 del Congreso de Nueva York y se espera que gane el día de las elecciones debido a la inclinación hacia la izquierda de su distrito.

De acuerdo con la prensa, desde que DonaldTrump se convirtió en presidente, “la extrema izquierda ha logrado derrocar a cinco demócratas del establishment, una advertencia para el partido en general”.

“La selección de rostros frescos y jóvenes subraya la diversidad racial e ideológica que los demócratas esperan que les entregue al Senado y a la Casa Blanca, como lo hizo en la Cámara en las elecciones intermedias de 2018. Los liberales, sin embargo, ya están pensando en enero, cuando esperan obligar a un posible presidente Biden y Pelosi a hacer avanzar algunas de sus preciadas propuestas”, señaló el Post.

La agenda de la extrema izquierda ha sido, sin embargo, problemática para Nancy Pelosi, una de las líderes del partido, quien ha dicho que se necesita un enfoque de “gran carpa que permita a los moderados representar a sus distritos y llegar a los conservadores”.