Los dreamers es el nombre con el que se le conoce a por lo menos 700 mil jóvenes indocumentados en Estados Unidos que fueron llevados por sus padres a este país cuando eran niños. La traducción en español es: los soñadores, quienes acaban de recibir una buena noticia por parte del Tribunal Supremo de Estados Unidos que, al revisar una petición del gobierno, no le dio el aval al presidente Donald Trump de acabar con el programa que ha frenado su deportación durante los últimos cinco años.

Se trata del DACA (que en español se traduce en Acción Diferida para los Llegados en la Infancia), una iniciativa del expresidente Barack Obama que ha sido blanco de críticas por parte de la administración Trump. Tanto así que el propio presidente anunció, poco tiempo después de su posesión, que acabaría con el programa y hasta dio una fecha: el próximo 5 de marzo.

Sin embargo, la decisión del Tribunal Supremon suspendió esa fecha y ahora los planes de Trump tienen que cambiar. Pero su estrategia, explican expertos en la materia, debe ser radicalmente diferente a la que hasta ahora ha tenido, pues la justicia en Estados Unidos no le ha dado lo que él les ha pedido. En el caso de DACA, por ejemplo, dos jueces, uno en Nueva York y otro en California, ya le habían advertido al mandatario que no podía hacer nada en contra del programa para los indocumentados.

Al presidente no le cayó bien la decisión y optó por saltarse varios pasos del camino jurídico de Estados Unidos para presentar una apelación, y se remitió directamente al Tribunal Supremo, la última instancia en estos casos. Y una vez más, no le dio la razón. Al respecto, Trump se refirió a que el tribunal a que ha debido acudir, el Tribunal de Apelaciones de San Francisco y ahora el que deberá decidir de fondo qué pasará con los dreamers, no le dará ninguna sorpresa.

“No hay nada tan malo como el Tribunal de San Francisco (…) Nosotros perdemos, perdemos, perdemos y luego peleamos en el Tribunal Supremo”, dijo Trump, que añadió: “Veremos qué ocurre, esa es mi actitud”. Con la fecha del final de DACA eliminada, ahora es el Congreso el que debe definir el futuro de por lo menos 700 mil jóvenes. Pero el tema lleva más de un año en el legislativo y todavía no hay una solución a la vista.