Un estudio dado a conocer este viernes cifra en 59 el número de muertes prematuras en Estados Unidos que pueden ser atribuidas a las emisiones de los 482.000 vehículos de Volkswagen (VW) dotados con un software ilegal para ocultar sus emisiones reales.

El informe, publicado en la revista científica Environmental Research Letters y realizado por el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) y la Universidad de Harvard, añadió que si VW limita las emisiones de los vehículos afectados para finales de 2016, se evitarán 130 muertes en los próximos años.

El estudio, titulado «Impacto del aparato de manipulación del control de emisiones de Volkswagen en la salud pública de Estados Unidos», añade que el coste del exceso de emisiones incurridos por los vehículos de VW de 2008 a 2015 ha sido de 450 millones de dólares.

Y en caso de que Volkswagen arregle las emisiones para finales de 2016 y se ajusten a las regulaciones estadounidenses, el ahorro en costes sociales será de 840 millones de dólares, añadieron los investigadores.

Los investigadores calcularon que entre 2008 y 2015 las emisiones reales de óxidos de nitrógeno de los vehículos de VW afectados por la manipulación fueron 36,7 millones de kilogramos superiores a lo declarado inicialmente por el fabricante alemán.

Y a partir de 2016, los 482.000 vehículos emitirán 82 millones de kilogramos adicionales de óxidos de nitrógeno si sus emisiones no se reducen a lo establecido por la normativa.

«Si estos vehículos cumpliesen las regulaciones de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) para finales de 2016, asumiendo un ritmo constante de reparaciones empezando en enero de 2016, esperamos que se evitarían emisiones de 76,6 millones de kilogramos» de óxidos de nitrógeno.

Además de los fallecimientos prematuros calculados, los investigadores dijeron que las consecuencias para la población estadounidense de la emisiones excesivas de los vehículos VW incluyen 31 casos de bronquitis crónica y 34 admisiones hospitalarias.

EPA denunció en septiembre que desde 2008 Volkswagen ha instalado en sus vehículos dotados con motores diesel de 2 litros un software ilegal para ocultar sus emisiones de óxidos de nitrógeno, que son hasta 40 veces superiores a las permitidas por las autoridades estadounidenses.

A principios de octubre, el principal directivo de VW en Estados Unidos, Michael Horn, admitió en el Congreso que el fabricante instaló el software con la intención de engañar a las autoridades y reconoció que no la mayoría de los vehículos trucados no podrán ser reparados hasta 2017.

Los modelos en Estados Unidos dotados con el software ilegal y cuyas emisiones son superiores a las permitidas:

Jetta, modelos 2009 a 2015
Beetle, modelos 2009 a 2015
Audi A3, modelos 2009 a 2015
Golf, modelos 2009 a 2015
Passat, modelos 2014 a 2015