Este miércoles 1 de febrero las autoridades australianas informaron el hallazgo de una cápsula radiactiva que se había perdido la semana pasada en la zona occidental de ese país. De acuerdo con el ministro de Servicios de Emergencia de Australia, Stephen Dawson, el dispositivo se cayó del camión que lo transportaba desde la localidad australiana de Newman hasta la ciudad de Perth y provocó una búsqueda masiva a lo largo de una ruta de 1.400 kilómetros.

El representante del gobierno regional precisó que la cápsula fue hallada junto a una carretera, a unos 50 kilómetros al sur de la ciudad de Newman, después de una búsqueda desafiante similar a tratar de encontrar “una aguja en un pajar”.

“Quiero remarcar que este es un resultado extraordinario. Los equipos de búsqueda literalmente han encontrado la aguja en el pajar. Creo que los australianos occidentales podrán dormir mejor esta noche”, declaró Stephen Dawson.

Además, Dawson informó que los servicios de emergencia utilizaron equipos especializados, incluidos detectores de radiación, durante la búsqueda del dispositivo. Ahora, las autoridades de Australia revisarán las leyes que sancionan el mal manejo de material radiactivo con una multa de 1.000 dólares australianos (707 dólares).

¿Por qué la cápsula representaba un peligro?

La cápsula, que mide 6 milímetros de diámetro y 8 de largo, contiene una cantidad de Cesio-137, un isótopo radiactivo para el cuerpo humano, que es utilizado normalmente en medidores y emite una radiación equivalente a 10 rayos X por hora. El pasado viernes 27 de enero, el Departamento de Salud de Australia Occidental publicó una nota alertando que cualquiera que encontrara la cápsula y no supiera cómo manipularla podía llegar a sufrir graves problemas de salud como “quemaduras o enfermedades por radiación como el cáncer”.

El dispositivo, que es común en la industria minera como medidor de densidad, estaba siendo utilizado en la mina Gudai-Darri de Rio Tinto, en la remota región de Kimberley. Una empresa subcontratada lo recogió del sitio de la mina el 12 de enero para trasladarlo a una instalación de almacenamiento en los suburbios del noreste de Perth, en Australia.