La policía informó que dos coches bomba detonaron con un intervalo de 10 minutos en la concurrida zona comercial de Karrada, en el corazón de la capital. Las explosiones afectaron restaurantes y cafeterías cercanas repletas de personas el sábado en la noche.

En la primera detonación murieron siete personas y otras 10 en la segunda; además de las decenas de heridos. Fuentes médicas confirmaron las cifras de víctimas pero no dieron su nombre porque no estaban autorizados a hablar con los periodistas.

El atentado ocurre mientras el primer ministro canadiense Stephen Harper hizo el sábado una visita sorpresiva a Irak donde prometió continuar su apoyo a la batalla que libra ese país contra el grupo extremista Estado Islámico.

La visita de Harper a Bagdad y la región curda en el norte se produjo en momentos en que siete mujeres y niños murieron por una bomba en un camino y que un atacante suicida mató a seis soldados iraquíes.

La misión de las Naciones unidas en Irak reportó el sábado que 812 iraquíes, incluso 277 miembros de las fuerzas de seguridad y milicias aliadas, murieron en abril. La cifra incluye más de 300 civiles muertos solamente en Bagdad y suburbios.

El gobierno canadiense anunció 139 millones de dólares en ayuda adicional para hacer frente a la crisis de los refugiados en la región, además de otros 67 millones de dólares que ya había comprometido

El primer ministro iraquí Haider al-Abadi recibió a Harper en Bagdad. Canadá forma parte de la coalición internacional liderada por Estados Unidos que apoya a las fuerzas iraquíes con bombardeos, armas y entrenamiento.

Harper prometió continuar el apoyo de su gobierno a Irak.

«Canadá no se mantendrá de brazos cruzados mientras EI amenace a canadienses y cometa actos bárbaros de violencia e injusticia en Irak contra civiles inocentes», afirmó Harper en una declaración.

Al-Abadi elogió el papel de Canadá en la coalición por considerarlo «esencial» e instó a la comunidad internacional a unir fuerzas contra la amenaza extremista ya que «el terrorismo no solamente amenaza Irak sino la región y el mundo entero».