La administración del presidente saliente, Donald Trump, busca revertir el fallo del magistrado Emmet Sullivan a favor de los menores no acompañados que eran sujetos a expulsión del país, anunció esta madrugada el Departamento de Justicia. Esto después que el Gobierno impuso una norma que le permite a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) expulsar a extranjeros arrestados en la frontera argumentando una emergencia sanitaria por COVID-19.

En la orden, el juez advertía que los niños migrantes no acompañados que son detenidos por agentes fronterizos deben recibir las salvaguardias que el Congreso estableció para ellos y ser llevados a refugios supervisados por el Gobierno durante sus procedimientos de inmigración. El fallo del juez Sullivan solo afecta a niños no acompañados, no a los migrantes adultos.

Según datos de la CBP, en septiembre pasado más de 48.000 inmigrantes fueron expulsados bajo la normativa en cuestión en la frontera sur con México.

Niños migrantes de otros países son expulsados a México

El diario New York Times publicó un informe el 30 de octubre donde explicó que las autoridades fronterizas de Estados Unidos han expulsado a México a niños migrantes de Guatemala, Honduras y El Salvador, “violando un acuerdo diplomático con México y poniendo a prueba los límites de las leyes de inmigración y bienestar infantil (…) Las expulsiones ponen en riesgo a los niños al enviarlos sin un adulto acompañante a un país donde no tienen conexiones familiares”, se lee en el artículo.

De acuerdo con el diario, la mayoría de los niños, que parecen sumar más de 200 en los últimos meses, fueron entregados a las autoridades mexicanas de bienestar infantil.

“En muchos casos, han llevado a que los niños pequeños se intercambien entre agencias gubernamentales de los Estados Unidos y ahora, entre gobiernos de países que no son los suyos”, se lee en la publicación.

Las propuestas Biden en política migratoria

El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, que tomará posesión el próximo 20 de enero, prometió un giro en la agresiva política migratoria que ha aplicado la administración de Trump durante los últimos cuatro años.

Durante su campaña a la presidencia, Biden dijo que modernizará el sistema de inmigración de los Estados Unidos y “reafirmará el compromiso del país con los solicitantes de asilo y los refugiados”.

Biden aseguró que “las amenazas reales a nuestra seguridad, los carteles de la droga y los traficantes de personas, pueden evadir más fácilmente los esfuerzos de aplicación de la ley porque Trump ha asignado indebidamente los recursos para intimidar a los solicitantes de asilo legítimos”.

Esta semana, el exvicepresidente demócrata designó a Alejandro Mayorkas como secretario de Seguridad Nacional (DHS, por su sigla en inglés) de su futuro Gobierno, quien de ser aprobado por el Senado, sería el primer latino en el cargo y estaría al frente de las políticas migratorias de Estados Unidos.