Puede que antes de lo esperado comience a fluir petróleo de una reserva mar adentro tan vasta que podría transformar al diminuto país de Guyana en un importante productor de energía de Latinoamérica.

La producción de Liza, el descubrimiento hecho por Exxon Mobil, podría comenzar a partir de 2019, dijo el presidente de Guyana, David Granger, en entrevista desde República Dominicana, donde asistía a una cumbre política regional. Proyecciones anteriores estimaban que la producción comenzaría en 2020 o 2021.

“Creo que transformará a mi país, a mi población, y que podrá darle una buena vida a mi gente”, dijo Granger.

El valor de las reservas minimiza el tamaño del PIB del país, de US$3.200 millones, lo que podría sumar a Guyana a “las filas de los operadores importantes de petróleo y gas”, dijo Wood Mackenzie, una empresa de investigación sobre la industria energética, en un informe publicado este mes. La producción del país de habla inglesa podría ascender a 350.000 barriles por día en 2013, según el informe, lo cual lo situaría en alrededor de un tercio por debajo de la de Ecuador, que es miembro de la OPEP.

Descubrimientos

Hasta el momento, los perforadores realizaron tres descubrimientos en el bloque Stabroek, de 2,6 millones de hectáreas. Exxon tiene una participación del 45% en Liza, que contiene más de 1 millón de barriles de petróleo y queda a unos 192 kilómetros de la costa del país en el Caribe. Sus socios Hess Corp. y Cnooc Ltd. también tienen participaciones.

Exxon todavía está probando el campo vecino de Payara, mientras que un tercer depósito más profundo debajo del campo Liza contiene hasta 150 millones de barriles, dijo el Gobierno en respuesta a preguntas enviadas por e-mail.

Inversiones

El Gobierno planea utilizar el dinero para construir escuelas, autopistas y puentes y así desarrollar el país poco poblado y cubierto de selvas, por lo cual muchos de sus 800.000 ciudadanos se trasladan en botes. Guyana también planea abrir un fondo de patrimonio soberano con asesores canadienses, dijo Granger.

El Gobierno también planea invertir en energía solar, eólica e hidroeléctrica para depender menos de los combustibles fósiles y poder exportar la mayor cantidad de petróleo y gas posible, agregó.

Exxon comenzó a prestarle atención a Guyana en 2007, cuando el entonces presidente venezolano, Hugo Chávez, nacionalizó US$10.000 millones en activos suyos en el país vecino. Granger desarrolló una buena relación con Rex Tillerson, máximo ejecutivo de la empresa en ese momento y actualmente el nominado para ocupar la cartera de secretario de Estado del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

Disputa

Granger dijo que espera más inversiones en minería cuando su país zanje una disputa por un territorio conocido como el área de Esequibo, que comprende cerca de dos tercios del territorio guyanés y es reclamada por Venezuela.

En diciembre, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, recomendó un año de mediaciones adicionales para la disputa vigente hace décadas antes de encaminarla a la Corte Internacional de Justicia. La disputa postergó inversiones en el oro, la bauxita y los diamantes de la región, dijo Granger.