Cinco entradas, 64 lanzamientos. José Quintana no pudo frenar a la ofensiva de los Cerveceros de Milwaukee. Por lo menos, no por completo. Durante su presencia intentó maniatarlos, pero en la tercera entrada uno de los candidatos a quedarse con el Jugador Más Valioso de la Liga Nacional, Christian Yelich, se encargó de romper el cero en el marcador. El jardinero izquierdo aprovechó una recta adentro del colombiano para conectar un sencillo al jardín central y así darle la primera ventaja a Milwaukee.

Esa fue la única carrera que aceptó el lanzador zurdo nacido en Arjona (Bolívar). Fue la única desconcentración de su salida, que terminó siendo más corta de lo esperado, sobretodo, por los números que presentaba contra los Cerveceros de Milwaukee en la temporada. El manager Joe Maddon no quiso llevar al máximo al lanzador. Imparable de Yelich abriendo la sexta entrada y afuera Quintana. Seis hits salieron de los bates de la ofensiva de Milwaukee en contra del colombiano, quien cuando se vio en apuros supo forzar su brazo para salir de ellos.

A lo largo de la salida, José Quintana atacó la zona de strike. De los 20 jugadores a los que enfrentó, tan solo tres llegaron a cuenta llena. Tan clara era la idea del colombiano, que 11 bateadores le vieron tres lanzamientos o menos al colombiano. Salió con una carrera en contra, con ese despiste de la tercera entrada frente a un pelotero que le vio a la perfección la pelota y le conectó tres de los seis imparables que permitió el zurdo abridor. La salida de Maddon en la sexta entrada significó el final de la salida de Quintana, quien se fue sin decisión.

Y no ganó ni perdió debido a que el primera base de Chicago, Anthony Rizzo, conectó un cuadrangular enorme por el jardín derecho de Wrigley Field. Fue el 1-1 que le daba ilusión a los Cubs. Pero como se verá a lo largo de la postemporada, estos encuentros de series cortas, el pitcheo es lo más importante y los Cerveceros contaron este lunes con un Jhoulys Chacín inmenso, quien maniató a los bates de Chicago a tan solo un imparable, una carrera y dos bases por bolas.

Así continuaron los lanzadores relevistas de Milwaukee: dominadores. Joakim Soria, Corey Knebel y Josh Hader le cerraron la puerta en la cara a los Cubs, que no pudieron hacer nada para irse arriba en el marcador y posteriormente, después de la parte alta de la octava entrada, cuando Lorenzo Cain y Ryan Braun le conectaron los imparables al lanzador Justin Wilson con los que impulsaron las dos carreras que sellaron el 3-1 para igualar el marcador. Los bates de Chicago tan solo conectaron tres imparables y negociaron tres bases por bolas. Cinco jugadores se quedaron en base.

Con esta derrota, los Cubs perdieron la oportunidad de ganar la división cental de la Liga Nacional por tercer año consecutivo. A pesar del resultado, avanzaron como uno de los mejores comodines del viejo circuito y este martes jugarán contra el perdedor del partido de desempate entre Dodgers y Rockies para definir el equipo que enfrente a los Cerveceros de Milwaukee, campeones por segunda vez en su historia del centro de la Liga Nacional, en la serie divisional.