Emanuel Balbo lloró en 2012 la muerte de su hermano. Óscar Gómez es uno de los señalados como autor de ese asesinato. Este sábado, Balbo, hincha de Belgrano, fue a ver el clásico ante Tallerres, ingresó a la tribuna Willington del estadio Mario Alberto Kempes, en Córdoba, Argentina, y se encontró con Gómez.

El reclamo por el suceso de cinco años atrás se hizo presente. Óscar, conocido como “Sapo”, no encontró otra forma de defenderse que la de gritar que Emanuel era hincha de Talleres.

Los hinchas de Belgrano empezaron a golpear a Balbo, mientras él intentaba huir de la paliza descendiendo por la tribuna en busca de la salida. La tragedia ocurrió cuando empujado por las agresiones se lanzó por uno de los accesos a las gradas, cayó aproximadamente cuatro metros y sufrió graves heridas que lo habían dejado con muerte cerebral. Este lunes se confirmó lo peor: falleció tras los cobardes ataques que padeció.

“No hay más nada que hacer”, le dijeron los médicos del Hospital de Urgencias de Córdoba a la familia de Emanuel, según informa LaVoz.com.ar. “Ingresó con fractura y hundimiento parietal, con edema cerebral, en estado de conciencia muy bajo, incluso ingresa en paro cardiorrespiratorio el cual se logra sacarlo, pero su estado es grave. Es un trauma de cráneo grave, es crítico su estado, a tal punto que hay muy poco reflejo, tiene pocos signos de vitalidad cerebral”, le manifestó el subdirector de hospital, Maximiliano Titarelli, a Cadena 3.

Raúl Balbo, padre del hincha de Belgrano agredido salvajemente, explicó: “Lo primero que quiero aclarar es que mi hijo no es hincha de Talleres, mi hijo no tiene ningún tatuaje de Talleres y mi hijo no estaba robando en la cancha, mi hijo es bien de Belgrano”.

“El problema se arma porque a mí hace cuatro años me mataron un hijo y él va a la cancha y se encuentra con uno de los que lo mataron. Ahí se arma el problema y Oscar Gómez, poco hombre, en vez de él defenderse solo, incitó a la violencia con todos los amigos que tenía ahí agrediendo a mi hijo. Empezaron a pegarle y hacerle lo que le hicieron”, agregó el padre que padece el hecho de que una vez más el fútbol sea testigo de una violencia sin sentido.

El papá de Emanuel también contó cómo fueron los sucesos en los que Gómez asesinó a su otro hijo años atrás: “Oscar Gómez es uno de los que me mató a mi hijo en el 2012. Venía corriendo picadas con otro tipo en dos autos y lo llevaron por delante y lo mataron a él y al amigo. Yo estoy esperando que la Justicia haga algo por eso y ahora me están por arrebatar a otro hijo. En vez de defenderse solo llamó a todos los amigos agrediéndolo a mi hijo diciendo ‘él es hincha de Talleres, tírenlo de acá porque es hincha de Talleres’, y así terminó mi hijo”.

La fiscal Liliana Sánchez, al frente del caso, aseguró que ya hay cuatro detenidos por el acontecimiento, que Óscar Gómez “tiene orden de captura y en este momento está prófugo”, y que los capturados serán imputados por “tentativa de homicidio agravado por la ley de espectáculos deportivos”. También dijo que “se siguen analizando los videos para tratar de determinar si hay más involucrados”.

Lo menos importante es que el partido entre Belgrano y Talleres de Córdoba finalizó 1-1. Lo más lamentable, que la muerte siga siendo gestada en los estadios de fútbol y que el hincha del club rival (en este caso no lo era) sea visto como un enemigo al que hay que aniquilar.