Noruega dio este miércoles luz verde a la construcción bajo una montaña del primer túnel marítimo del mundo, para evitar a los barcos, incluso de gran calado, navegar en aguas peligrosas.

Perforado en una montaña que separa dos fiordos en el oeste del país, este paso de 1,7 km de largo y 36 metros de ancho permitirá evitar una navegación difícil ante la península de Stad, azotada a menudo por fuertes tormentas.

«El túnel para barcos de Stad va a ser al fin construido» declaró el ministro noruego de Transportes, al presentar un gran plan de transportes para el periodo 2018-2029.

El mar del Norte es a menudo escenario de fuertes tormentas y marejadas frente a esta península, y muchos navíos deben esperar a que se calmen las aguas antes de poder navegar frente a sus costas.

En la época de los vikingos, pese a ser éstos grandes navegantes, a veces preferían evitar estas aguas y transportaban las embarcaciones por vía terrestre desde un fiordo al otro.

En otras partes del mundo ya existen túneles para barcazas -como en el canal de Midi en Francia-, pero el de Stad será el primero en poder acoger a barcos de hasta 16.000 toneladas para el transporte de fletes y pasajeros.

El proyecto, de 2.700 millones de coronas (295 millones de euros) requerirá entre tres y cuatro años de obras, y los trabajos se iniciarán en la primera mitad del plan plurianual de 2018-2029, según el gobierno.