El presidente Vladimir Putin anunció este domingo que 755 diplomáticos estadounidenses deberán abandonar Rusia, de acuerdo a la decisión de reducir a 455 los funcionarios de ese país en su territorio.

«Más de un millar de personas trabajaban y trabajan aún» en las legaciones diplomáticas estadounidenses en Rusia, indicó Putin en una entrevista difundida por la cadena televisiva pública Rossia 24.

«755 personas deberán interrumpir sus actividades en Rusia» precisó.

«Hemos esperado suficiente tiempo, con la esperanza de que la situación quizás mejoraría», declaró Putin en la entrevista. «Pero todo indica que incluso si la situación cambia, eso no va a suceder pronto», advirtió.

El Senado estadounidense aprobó el jueves una ley que refuerza las sanciones contra Rusia a causa de su injerencia en las elecciones presidenciales de 2016, que llevaron a Donald Trump a la Casa Blanca, así como por su anexión de Crimea en 2014.

En diciembre pasado, el entonces presidente Barack Obama ordenó la expulsión de 35 diplomáticos rusos.

Trump dijo en ese momento que quería mantener una buena relación con el gobierno ruso, y Putin decidió, al llegar su homólogo estadounidense al poder, que no iba a replicar a las sanciones para dar tiempo a que la relación bilateral mejorara.

Esta réplica rusa significa que Estados Unidos tendrá el mismo número de diplomáticos que Rusia tiene en ese país, es decir 455.

La orden de Putin, que entra en vigor a partir del 1 de agosto, también implica el cierre de dos edificios en la región de Moscú, una residencia de verano y un almacén, ambos propiedad de la embajada estadounidese.