El mediador de la ONU en las negociaciones sirias de paz, Staffan de Mistura, prosiguió este lunes con sus consultas y se reunió con la delegación del Gobierno de Damasco, mientras que en Siria la violencia se agrava pese a un alto el fuego supuestamente en vigor.
La explosión de un coche bomba en las afueras y al sur de la capital siria acabaron estelunes con la vida de al menos 15 personas y dejaron cerca de un centenar de heridos.
En Alepo, mientras tanto, unas 60 personas han muerto en tres días de intensos combates en Alepo, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La delegación del Gobierno sirio continúa en Ginebra para proseguir con las reuniones con De Mistura, pese a que la delegación opositora suspendió temporalmente su participación en este proceso diplomático.
Ello a la espera de observar mejoras en materia de seguridad y de acceso humanitario a las áreas militarmente cercadas por el ejército.
A su llegada a la sede de la ONU para su reunión con De Mistura, el jefe negociador sirio, Bashar Jafaari, adelantó que empezaría su conversación con el mediador denunciando el atentado de este miércoles en Damasco.
“La explosión que los terroristas han perpetrado en la zona de Sayeda Zeineb tuvo como blanco un hospital a donde se había llevado a heridos (evacuados la semana pasada) de Fua y Kefraya, asediadas por grupos rebeldes”, declaró.
En cambio, Jafaari no comentó la escalada de la violencia en Alepo, donde el Ejército sirio con ayuda de fuerzas rusas intenta recuperar el control de barrios controlados por grupos opositores armados.
Una comparecencia ante la prensa del enviado sirio, que debía tener lugar al término de su reunión con De Mistura, y que era esperada por decenas de periodistas, fue cancelada media hora después de la hora prevista para su inicio.
De Mistura ha señalado que la tregua está “en peligro” y que puede quebrarse definitivamente si no se actúa rápidamente, para lo cual pidió la intervención de una veintena de países que integran el Grupo Internacional de Apoyo para Siria, coordinado por Estados Unidos, Rusia y la ONU.