Roger Federer regresó a uno de sus torneos favoritos, Dubai, e inició la conquista de su octavo título con una victoria cómoda sobre el francés Benoit Paire, 39 del mundo, por 6-1 y 6-3.

En los Emiratos Arabes Unidos, donde logró siete coronas ATP, Federer reapareció con mucha soltura y un gran nivel de juego. De hecho, en apenas 54 minutos se deshizo de Paire, con jugadas de ataque con su sello y además aprovechando la irregularidad del galo.

Ahora en el décimo puesto del ranking, el tenista suizo concretó cuatro de sus seis chances de quiebre, mientras que el francés no pudo firmar un solo rompimiento en tres oportunidades que generó. Paire, que había caído contra Federer en sus tres enfrentamientos previos, se vio además perjudicado por unos problemas en el tobillo derecho.

En el primer set, Federer quebró en el cuarto juego y, acto seguido, logró salvar su saque en tres oportunidades para quedar 4-1. Logró un nuevo quiebre en el sexto game y luego definió con el propio, en sólo 29 minutos. Ese golpe fue casi de nocaut para Paire, quien se enloqueció en más de un caso tirando la raqueta. Otros dos quiebres, acelerando con su derecha y bastante preciso le dieron el triunfo al suizo.

En la próxima instancia, Federer jugará con un tenista ruso: será Mikhail Youzhny (83º; ex-Top 10) o Evgeny Donskoy (116º), surgido de la clasificación. Así busca la mejor puesta a punto en Dubai, donde busca su octavo título, con vistas a los Masters 1000 estadounidenses de Indian Wells y Miami.