La actual espiral de violencia que vive la zona, ha tenido consecuencias para el sistema educativo, que hoy se ha paralizado desde el mediodía en Jerusalén en protesta por la falta de seguridad en los centros escolares israelíes.

Desde hace tres semanas la ciudad se ha convertido en epicentro de disturbios y apuñalamientos, a los que se sumó esta misma mañana la deflagración de un explosivo que portaba una palestina en un acceso de vehículos en la parte oriental, según la Policía.

Ante la falta de guardias de seguridad en todos los centros educativos, la Asociación de Padres de la ciudad, en coordinación con la Alcaldía jerosolimitana, declararon un parón general en las escuelas estatales a partir de las 13.30 hora local, horario en el que los guardias que vigilan la entrada de los colegios suelen abandonar su puesto de trabajo.

La medida afecta a 270.000 niños entre 3 y 18 años, repartidos en alrededor de 2.500 centros, entre guarderías, colegios e institutos de educación secundaria en toda la ciudad e integrados en el sistema educativo israelí.

Secundan la huelga escuelas del sector árabe, del ultra-ortodoxo judío y en general de todo centro lectivo a excepción de los destinados a la educación especial, precisó a Efe una portavoz del Ayuntamiento de Jerusalén.

El parón es respaldado por los sindicatos de profesorado y asociaciones de alumnos, explicó a Efe Paz Cohen, presidente de la Asociación de Padres de la ciudad, antes de precisar que «la razón por la que se adopta esta drástica medida es que los guardas abandonan los centros en medio del día lectivo».

La problemática viene originada por recortes en las partidas que otorga el Ministerio de Seguridad Pública que impide que los guardas prolonguen su turno hasta las 16.30 horas, cuando suelen cerrar la mayor parte de los centros.

«Aquí tenemos al guarda hasta las 16.30, pero en el colegio de mi otro hijo, se larga a las 13.30 y las clases siguen como si nada. Está bien la huelga», afirma Joel Klein al ir a recoger a uno de sus vástagos a un centro limítrofe con el territorio palestino.

Del orden de 400 escuelas de Jerusalén son consideradas por la Policía en necesidad de seguridad permanente.

La labor de los agentes responde al antiguo horario lectivo obligatorio que había en los centros y que no ha sido actualizado por las instituciones relevantes, pese a que las necesidades han cambiado y los centros cierran tres horas después.

Para Ayala Halevy, madre de una niña de 8 años, «en realidad es todo psicológico. En caso de una emergencia terrorista el guarda no tiene capacidad de hacer prácticamente nada».

El presidente de la Asociación de Padres de alumnos explicó que al menos un centenar de colegios en zonas consideradas peligrosas ni siquiera cuentan con vigilancia y destacó que los recortes han provocado que la situación se haga insostenible.

La portavoz del Ayuntamiento dijo que tras el conflicto bélico del año pasado el citado Ministerio otorgó presupuesto para reforzar la seguridad en las escuelas entre septiembre y diciembre y que, a partir de enero, la propia Alcaldía asumió el gasto.

Señaló que la diferencia para cubrir las necesidades para el curso actual son de 15 millones de shekels (3,44 millones de euros), «una cifra nada desorbitada para cumplir con los requerimientos de la Policía y ofrecer seguridad a los niños».

El regidor, Nir Barkat, exhortó al primer ministro, Benjamín Netanyahu, a intervenir para «resolver cuanto antes la crisis de seguridad» y defendió que es responsabilidad del Estado y no de la Municipalidad proveer seguridad a los escolares.

En el caso de las guarderías estatales a partir de los 3 años no existe una legislación específica sobre la materia en Jerusalén, si bien la Policía supervisa cuáles deben contar con vigilancia.

Los parvularios deben tener puertas enrejadas y un dispositivo que permita únicamente abrirlas desde el interior, y las que no disponen de vigilancia en zonas específicamente peligrosas son controladas por patrullas especiales de seguridad que han de encontrarse a dos minutos del centro en caso de emergencia.

El Ministerio de Economía autorizó temporalmente hoy y por un mes la ampliación del horario de los guardias en los centros lectivos.

«Los guardias desempeñan un importante papel en la lucha contra el terrorismo en Israel, la preservación del orden y la restauración la sensación de tranquilidad y seguridad entre la ciudadanía. He autorizado la ampliación del horario de los guardias a dos horas adicionales por turno», anunció en un comunicado el ministro, Arie Deri, poco antes de iniciarse la huelga.