Los talibanes y sus colaboradores habrían asesinado a más de 100 exmiembros del anterior gobierno afgano, personal de seguridad y otras personas que trabajaron con las fuerzas internacionales, según un informe de la ONU al que accedió la AFP. El reporte describe severas restricciones a los derechos humanos por parte de los nuevos gobernantes de Afganistán. Sin embargo, los talibanes rechazaron en bloque estas acusaciones.

Los talibanes y sus aliados mataron a más de 100 ex miembros y colaboradores del anterior gobierno afgano.

Eso afirma un informe de la ONU al que accedió la AFP y que fue rechazado por los fundamentalistas islamistas.El reporte describe severas restricciones a los derechos humanos por parte de los nuevos gobernantes de Afganistán.Esto se suma a la represión de protestas pacíficas, así como a la falta de acceso al trabajo y la educación para mujeres y niñas. Desde que los talibanes tomaron Kabul el 15 de agosto, la misión de la ONU en Afganistán ha recibido más de un centenar de reportes de asesinatos que considera creíbles.

La delegación informó que más de dos tercios de ellos han sido “muertes extrajudiciales cometidas por autoridades de facto o sus socios”.Los talibanes rechazaron en bloque estas acusaciones. El ministerio del Interior dijo que no se “ha matado a nadie desde el anuncio de la amnistía” y reiteró que los asesinatos de antiguos miembros de las fuerzas de seguridad se deben a rivalidades personales.