Durante los últimos meses las plataformas digitales como Twitter y Facebook han empezado a implementar herramientas y a cambiar sus algoritmos para moderar cada vez más los lenguajes de odio y la difusión de las miles de noticias falsas o con contenidos radicales que circulan a diario dentro de ellas. Incluso dos tuits de Trump, que hasta ahora parecía intocable, fueron vetados por contener información no verificada. Sin embargo, un estudio del Instituto Tecnológico de Oxford muestra que este contenido está lejos de desaparecer y está migrando a aplicaciones como Telegram, cuyo nivel de seguridad es mucho más alto que el de Whatsapp, por ejemplo.

Una de las reglas básicas de Internet es que no olvida nada de lo que hacemos, en parte porque, en términos de seguridad, no es perfecto. Lo mismo ocurre con las redes sociales y con gran parte de las plataformas de mensajería. Este principio ayuda tanto como afecta, pues obliga a los contenidos negativos y nocivos a que se concentren en espacios protegidos a través de encriptaciones mucho más complejas de los mensajes.

Whatsapp, de hecho, con poco más de mil millones de usuarios mensuales en activo, es una de las aplicaciones más utilizadas para difundir cadenas falsas e información engañosa. Eso sí, en algunos países su uso ha disminuido por los reportes y las denuncias al respecto, además de las medidas que ha implementado la compañía de Mark Zuckerberg para ayudar a los usuarios a identificar contenido potencialmente falso.

Ahora bien, el estudio del Instituto de la universidad británica se dio cuenta que Telegram, que hasta el momento no ha sido tan estudiada en este campo, a pesar de tener 400 millones de usuarios activos, es un canal muy importante para las noticia falsas y en especial para mensajes ultraderechistas. “Utilizamos un gran conjunto de datos de acceso abierto para analizar qué fuentes de noticias en inglés prevalecen en los canales públicos de Telegram, la escala de su audiencia y cómo se difunde la información en la plataforma”.

Los resultados son reveladores, comenzando por el hecho de que los portales de “noticias basura”, como se les menciona en el documento, tienen un tercio de las visualizaciones entre 12 importantes portales noticiosos que fueron tomados en cuenta en el estudio, entre ellos The Daily Mail y The Guardian. Además, resultó evidente que este tipo de noticias circulan exclusivamente en los canales especializados, no en otras plataformas como es el caso de los grandes medios.

Según el instituto, se concentraron en los mensajes compartidos entre octubre de 2018 y noviembre de 2019. El grupo de datos de acceso abierto tenía 24,7 millones de mensajes. Así, revisaron las vistas de las noticias, teniendo en cuenta, eso sí, que “las vistas de un mensaje representan la cantidad de usuarios que vieron una publicación desde cualquier dispositivo. Las vistas múltiples del mismo usuario solo se cuentan como una, siempre que estén dentro de un período de cuatro días. Aunque si un usuario vuelve a ver un mensaje después de cuatro días, Telegram cuenta esto como otra vista”.

El portal en inglés con más visitas fue The New York Times. A este le siguen otros dos fuertemente cuestionados. “TR.news, un sitio web asociado con el extremista británico Tommy Robinson, y Summit.news, un sitio web asociado con el extremista estadounidense Paul Joseph Watson, fueron los siguientes en la lista”.

Además, el texto señala: “Infowars.com y southfront.org, respaldados por Rusia, ambos sitios que a menudo contienen información errónea, también recibieron más de 2 millones de visitas en Telegram durante el período de tiempo. Los resultados muestran que las principales fuentes de noticias reciben mucha atención en los canales de Telegram. De las doce principales fuentes de noticias examinadas, el 33% de todas las visitas se dirigen a las fuentes de noticias basura”.

Uno de los puntos importantes a la hora de estudiar una plataforma como Telegram es que dejan cierta libertad al usuario para que escoja la información que quiere ver. “A diferencia de muchas plataformas de redes sociales, Telegram no ofrece recomendaciones o una línea de tiempo algorítmica, que podría mostrar el contenido creado a los usuarios que no están suscritos a canales particulares. Esto significa que gran parte del alcance es impulsado por la autoselección”. Esto no ocurre en empresas con Facebook o Twitter.

En conclusión, los resultados del estudio son dispares, porque las cosas no están ni tan mal ni tan bien. “Encontramos que si bien las fuentes de noticias convencionales reciben mucha atención en los canales de Telegram, las fuentes de noticias basura partidistas, particularmente del lado derecho del espectro político, también tienen audiencias significativas en la plataforma”.