El joven de 19 años detenido como presunto autor de un cadena de tiroteos en el centro de Florida (EE. UU.) que dejó tres víctimas mortales e igual número de heridos afronta nuevos cargos de asesinato, según informó este martes la Oficina del Alguacil del Condado Orange.

Una orden de arresto dada a conocer hoy por el alguacil John Mina eleva a tres el número de cargos de asesinato en primer grado que enfrenta Keith Melvin Moses, que fue detenido el mismo día de los hechos y acusado de un solo cargo.

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Moses está acusado de matar a tiros a la niña de 9 años T’yonna Major, a Nathacha Augustin, de 38 años, y al reportero de televisión Dylan Lyons, de 24 años.

El joven afronta además dos cargos de intento de asesinato por las heridas sufridas por la madre de la menor, que no ha sido identificada, y el camarógrafo del canal local Spectrum News 13 Jesse Walden, quienes debieron ser ingresados en hospitales locales.

De acuerdo con la orden de arresto, Moses inició la sucesión de ataques cuando el pasado 22 de febrero disparó a Augustin poco después de ser abordado desde un vehículo en el que viajaba la víctima mortal.

Horas después el joven retornó a la escena del crimen e ingresó a una vivienda por la puerta trasera donde disparó a la menor y a la madre, que resultó herida en el brazo. Ambas se atrincheraron en un baño y llamaron a la Policía.

Tras este ataque, Moses volvió a la calle y se dirigió hacia el vehículo del equipo de prensa, que no estaba identificado como tal, según los agentes.

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El joven disparó primero al camarógrafo, que se hallaba fuera del vehículo sacando el equipo de la parte trasera, y luego abatió a tiros al reportero, que se encontraba en el interior.

Un equipo del canal local WFTV, que también cubría el tiroteo de la mañana, grabó en video al atacante y prestó ayuda a las víctimas hasta la llegada de la Policía y los paramédicos.

Minutos después, Moses fue arrestado en las inmediaciones por efectivos policiales, quienes descubrieron en uno de los bolsillos de sus pantalones una pistola aún caliente, una señal de que acababa de ser utilizada, como señala el parte policial.

Moses, que cuenta con antecedentes desde que era menor de edad, fue inicialmente llevado a un hospital local y luego puesto a disposición de las autoridades, con las que se ha negado a brindar declaración alguna.