“Los que atacaron el puente han hecho que la vida sea un poco más difícil para la población”, afirmó Kirill Stremousov, un representante de las autoridades rusas de ocupación, a los medios rusos, minimizando el impacto del cierre de la vía. “No tendrá ninguna influencia sobre el resultado de los combates”, agregó, sin dar detalles sobre el alcance de los daños. Según él, “todo está previsto” y el ejército ruso instalará puentes militares para poder atravesar el río.

Jersón, capital de la región que lleva el mismo nombre, está situada apenas a unos kilómetros del frente, donde las fuerzas ucranianas lanzaron una contraofensiva destinada a recuperar los territorios perdidos en los primeros días de la invasión rusa de Ucrania. “Los ocupantes deberán aprender a nadar para atravesar el Dniéper, o salir de Jersón cuando aún pueden hacerlo”, escribió en Twitter Mijailo Podoliak, consejero de la presidencia ucraniana.

Natalia Goumeniouk, portavoz del mando sur de las fuerzas armadas ucranianas, también confirmó a los medios ucranianos que se bombardeó el puente. La artillería está “destinada a desmoralizar a las tropas” enemigas, dijo. La contraofensiva ucraniana en la región ya ha logrado recuperar terreno en las últimas semanas y se ha acercado al frente de Jersón.

La región es estratégica, ya que limita con la península de Crimea, que fue anexada por Moscú en 2014. Al ocupar Jersón, Rusia pudo conectar ambos territorios. Las autoridades de ocupación planean organizar un referéndum para anexar dicha zona, así como la región vecina de Zaporiyia.