La ofensiva rusa sobre la ciudad de Bajmut, en el este de Ucrania, ha dado muestra de estar ralentizándose, y podría haber alcanzado su “pico” de intensidad sin que las fuerzas del Kremlin hayan conseguido hacerse con el control de la ciudad, según dijo a EFE el experto militar ucraniano Serhiy Grabskiy.

“Hemos visto algunos signos de que los rusos se han visto obligados a ralentizar sus operaciones debido a la falta de personal y de municiones”, dijo Grabskiy, un coronel en la reserva que sirvió en misiones de paz en Irak y la antigua Yugoslavia.

El exmilitar hizo referencia a un vídeo publicado por el jefe del grupo de mercenarios rusos Wagner, Yevgueni Prigozhin, en el que este vuelve a quejarse de la falta de municiones y advierte de que “se desmoronará todo el frente” si su ejército privado se repliega de Bajmut.

El coronel en la reserva ucraniano señaló que es la primera vez que Prigozhin -cuyos mercenarios lideran la fuerza de asalto que ataca Bajmut- hace referencia a la posibilidad de un repliegue, lo que a su juicio apoyaría la tesis de que Rusia se está quedando sin fuerzas para sostener su ofensiva sobre la ciudad del Donbás.

De confirmarse esta posibilidad, agregó Grabskiy, “es posible que las fuerzas ucranianas resistan a la ofensiva rusa un par de días más y después comiencen un contraataque empujando al enemigo” a retroceder.

El experto militar ucraniano se mostró optimista ante la posibilidad de que las fuerzas ucranianas resistan y puedan “mantener sus posiciones una vez reciban apoyo y hagan rotaciones”.

Grabskiy también afirmó que no se observan signos de una retirada inminente de las fuerzas ucranianas de la ciudad.

Las fuerzas rusas han avanzado en las últimas semanas hacia su objetivo de rodear por completo Bajmut, y a las tropas ucranianas que defienden la ciudad sólo les queda una carretera para recibir suministros.

Pese a que la carretera está al alcance del fuego ruso, Kiev ha asegurado que puede seguir utilizándola con garantías, y ha anunciado el envío de nuevas tropas en los últimos días.

Si se repliegan, se desmorona

El jefe de la compañía rusa de mercenarios Wagner, el empresario Yevgueni Prigozhin, advirtió de que si sus efectivos se repliegan de Bajmut, ciudad en el este de Ucrania, “se desmoronará todo el frente”.

“Si la compañía militar privada Wagner se repliega de Bajmut se desmoronará todo el frente”, dijo en un vídeo publicado en YouTube Prigozhin, que añadió que el desmoronamiento puede llegar “hasta las fronteras de Rusia y, quizás, más allá”.

Añadió que los Wagner, por una parte, “atraen a todo el Ejército ucraniano y no le permite concentrarse en otros sectores del frente”.

“Y, por otra, avanzamos y los demás (los militares) se ven obligados a seguirnos para no quedar retratados”, dijo Prigozhin, considerado próximo al presidente ruso, Vladímir Putin. El jefe de los Wagner indicó que sus hombres siguen sin recibir la munición prometida por el Ministerio de Defensa de Rusia.

“En lo que se refiere a la munición: el 22 de febrero por la tarde se firmaron los documentos, el 23 de febrero fueron impartidas las órdenes de envío pero hasta hoy no se ha enviado gran parte de la munición”, afirmó en un comentario publicado anoche en Telegram. Prigozhin indicó que está intentando averiguar la causa de esta dilación, si es “simple burocracia o traición”.

Los Wagner, en cuyas filas combaten miles de reclusos, son la principal fuerza de asalto que ataca Bajmut, un importante nudo de comunicaciones, unido por sendas carreteras a las Kramatorsk y Sloviansk, las mayores ciudades de la región de Donetsk controladas por las fuerzas ucranianas.

El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha declarado que sus fuerzas defenderán Bajmut “mientras sea razonable”, por lo que no se descarta que las tropas ucranianas abandonen la ciudad, donde permanecen unos 4.500 de los 70.000 habitantes que tenía antes del estallido de conflicto.