Solamente dos futbolistas colombianos han ganado la Liga de Campeones de Europa. Iván Ramiro Córdoba jugó dos partidos con el Inter de Italia, que se coronó en la temporada 2009-2010, y James Rodríguez disputó cinco encuentros con el Real Madrid campeón en 2015-2016. En los registros de la Uefa, Edwin Congo aparece inscrito con el club merengue que ganó en 2001-2002, pero oficialmente no actuó ni un solo minuto.

Iván Ramiro y James levantaron la “Orejona”, pero ninguno fue clave para su equipo. Y ahora, aun sin ser titular, el guajiro Luis Díaz, es pieza fundamental del Liverpool inglés, que recibe hoy al Villarreal español, en una de las semifinales de la Champions.

En apenas tres meses, el exdelantero de Atlético Júnior y Porto de Portugal se ha ganado un lugar en el plantel de Anfield. Ha jugado 18 partidos, cuatro de ellos en el torneo continental. Más allá de eso, ha logrado demostrar por qué lo contrataron. Disciplinado y solidario en labores defensivas, ha resultado muy desequilibrante cuando ataca por las bandas. Ha participado directamente en nueve anotaciones, con cuatro goles y cinco asistencias.

Eso además de la rápida y efectiva adaptación que ha tenido en el equipo que dirige el alemán Jürgen Klopp. El idioma no ha sido un obstáculo para que se entienda a la perfección con los otros delanteros, en la artillería más internacional del mundo: el egipcio Mohamed Salah, el senegalés Sadio Mané, el brasileño Roberto Firminho, el portugués Diogo Jota, el belga Divock Origi, el japonés Takumi Minamino y el juvenil inglés Harvey Elliot.

Hasta los exjugadores históricos de los “Reds” se han rendido a los pies del colombiano, de 25 años, profesional desde 2016. Jamie Carragher, ahora comentarista en Sky Sports y columnista en The Telegraph, asegura que “el impacto que ha tenido en el equipo ha sido grande, porque fue la chispa que despertó a todos los atacantes. Tiene unas habilidades ridículas y una técnica impresionante para la velocidad de ejecución”. Y agrega: “A diferencia de otros futbolistas, que esperan llegar y tener un lugar asegurado, él ha sabido aportar saliendo desde el banquillo, pero también rindiendo al máximo cuando arranca los partidos. Por lo que me han dicho, siempre tiene la mejor actitud para el trabajo, y eso contagia a sus compañeros”.

Pues este miércoles, deesde las 2:00 p.m., Díaz tendrá una nueva oportunidad para lucirse, cuando Liverpool reciba al Villarreal español, que viene con viento en la camiseta luego de eliminar al poderoso Bayern Múnich alemán.

Todo indica que el técnico Kloop arrancará con sus dos hombres de confianza arriba, Salah y Mané, pero el colombiano será su primera alternativa en caso de que su equipo no logre vulnerar la defensa del submarino amarillo o que Liverpool se vaya en ventaja y su rival tenga que salir a atacar y dé espacios atrás, ideales para la velocidad y el ímpetu del guajiro, que en su carrera lleva 76 goles anotados, ocho de ellos con la selección nacional.

City vs. Madrid, partidazo

Contra cualquier otro rival, el Manchester City hubiera ganado por tres goles o más. El equipo de Pep Guardiola fue inmensamente superior al Real Madrid de Carlo Ancelotti, en el partido de ida de la primera semifinal de la Liga de Campeones de Europa.

El resultado, no obstante, fue 4-3 a favor de los ingleses, una ventaja que puede defender en la vuelta, en el Santiago Bernabéu, pues futbolísticamente tiene más. Pero el Madrid cuenta con mayor jerarquía que cualquier otro club en el mundo, y aun jugando mal se las arregla para dar la pelea, así que lo más prudente es decir que la serie sigue abierta.

A los dos minutos de juego el City ya ganaba, gracias a un gol de golpe de cabeza del belga Kevin De Bruyne. Y apenas iban 10 cuando llegó el segundo, por intermedio del brasileño Gabriel Jesús.

Pintaba para goleada, porque además los visitantes ni siquiera cogían el balón y veían cómo los locales llegaban con claridad y desperdiciaban opciones. Pero en la primera llegada anotó el Madrid, por intermedio de Karim Benzema, convertido en la gran figura del 13 veces campeón de Europa.

En el complemento el City siguió atacando, con la idea de ampliar la ventaja. Y lo consiguió tras un remate de cabeza de Phil Foden, a centro de Fernandinho. Sin embargo, de inmediato reaccionó el Real, y Vinicius Jr. anotó un golazo luego de correr más de 60 metros con la pelota pegada al pie y rematar a un costado ante la salida de Ederson.

Pero había más, mucho más. Bernardo Silva, desde el borde del área, sacó un zurdazo que se metió en el ángulo superior derecho del arco de Thibaut Courtois, para el 4-2, que se ajustaba un poco más a lo que había ocurrido en la cancha.

Cerca del final, el central español del City, Aymerick Laporte, cometió una mano dentro de su área y el árbitro rumano István Kovácsea, de impecable actuación, sancionó penalti. Karim Benzema, al estilo Panenka, decretó el 4-3 final, que le deja un sabor amargo al City, que debió liquidar la serie en su casa.

El Madrid, al que jamás se debe dar por muerto, deberá mejorar mucho, especialmente en defensa si pretende llegar a la final y seguir aspirando a lograr su “Orejona” número 14.