El gobierno boliviano arrancó este miércoles un inédito sistema gratuito de salud, con el registro de ciudadanos sin seguro, mientras los sindicatos de médicos respondieron con una huelga que se realizará en las próximas 48 horas como rechazo a una política que consideran improvisada.

«Nuestra meta es registrar a 5,8 millones de personas en Bolivia», informó en un comunicado de prensa enviado a la AFP, el vocero del programa «Seguro Universal de Salud» (SUS), Adolfo Zárate.

Centros de salud comenzaron a recibir la inscripción de personas al nuevo sistema, según reportes desde las ciudades de La Paz y Santa Cruz del canal privado de televisión Gigavisión, aunque con desorden, pues había desinformación.

Las personas sólo se registran con su cédula de identidad y facturas de luz o agua para acreditar un domicilio.

Según el Ministerio de Salud, de los 11 millones de habitantes, unos 5,8 millones de personas no cuentan con seguro de salud, a quienes se les brindará servicios básicos gratuitos dentro de tres meses, cuando concluya el registro.

La atención de salud se brindará en diferentes enfermedades, como diabetes, hipotiroidismo, gripe, neumonía, parkinson, problemas dentales y cáncer infantil.

El Ministerio de Salud informó en los últimos días que el SUS contará con un presupuesto de unos 1.392 millones de bolivianos (200 millones de dólares) del gobierno central y otros 200 millones de bolivianos (28,7 millones de dólares) como contraparte de gobernaciones regionales y alcaldías.

Los colegios regionales de médicos anunciaron su rechazo al seguro de salud, pues aseguran que es improvisado, al no contarse con el personal profesional suficiente ni los recursos económicos para solventar los gastos.

«Vamos a necesitar unos 1.000 millones de dólares, como mínimo, pero así no se puede garantizar un seguro universal de salud (…) no hay insumos (médicos) no hay camas» suficientes en los hospitales, afirmó el presidente del profesional Colegio Médico de Bolivia, Erwin Viruez.

Los médicos, como muestra de rechazo, cumplirán el jueves y viernes una huelga de 48 horas en hospitales públicos, la primera que tendrá que resistir el gobierno del presidente Evo Morales, quien llamó al diálogo.

«El paro de 48 horas declarado a nivel nacional se cumplirá desde el jueves», confirmó Henry Montero, otro dirigente de los médicos.