Una toma clandestina de combustible en un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) en el central estado de Puebla causó una fuga que llegó a los 20 metros de altura, sin provocar afectaciones a la población por la dispersión de los vapores por el aire, informaron las autoridades.

La fuga de combustible estalló alrededor de la 1.00 hora local (6.00 GMT) cerca de la autopista Puebla-Tlaxcala, en el municipio de Cuautlancingo.

Personal de Pemex aseguró al cuerpo de Bomberos de la región que el escape ya ha sido taponado.

«La fuga en el municipio de Cuatlacingo está controlada» porque el viento traslada los vapores, señaló Protección Civil de Puebla en las redes sociales.

El director de la Unidad Operativa Municipal de Puebla, Gustavo Salvatori, dijo en su cuenta de Twitter que estos vapores se dirigieron hacia el sur, pero que no hay peligro para la población.

Recomendó a los ciudadanos cerrar las puertas y las ventanas, y realizar sus actividades cotidianas si el olor no les resulta molesto.

«En cuanto aumente la temperatura los vapores desaparecerán», aseveró el director.