Los 250 pasajeros del vuelo han dormido en el aeropuerto sueco a la espera de que los efectivos encuentren y desalojen al animal

No fue un problema técnico, ni mecánico, ni tan solo humano. Fue un pequeño rodeor quien dejó en el suelo a un avión Airbus de la aerolínea sueca SAS, todo un mastodonte de los cielos si se compara el tamaño de una pequeña ratita con esta creación de la ingeniería humana.

El roedor fue encontrado en el interior del Airbus A330 de la aerolínea SAS antes del embarque de los casi 250 pasajeros del vuelo después de escapar «a la multitud de trampas» que los empleados y las fuerzas de seguridad colocaron en el avión para intentar interceptar al pequeño animal.

El comandante avisó tanto a la tripulación como a los pasajeros que «por razones de seguridad no procederemos al embarque del vuelo hacia Chicago por encontrarse a bordo una rata.
«Esperamos encontrar al animal a lo largo de la noche y queremos agradecer la comprensión demostrada por los 250 pasajeros que pasarán la noche alojados en un hotel del aeropuerto en Estocolmo a la espera de que podamos extraer al animal del aparato», señalan las mismas fuentes de la aerolínea.

Según han relatado los expertos de SAS, en un vuelo de larga distancia que cruza el Océano Atlántico puede resultar extremadamente peligroso volar manteniendo el roedor a bordo puesto que puede suponer un peligro para la seguridad del vuelo si el animal muerde cables en la zona interna del fuselaje.