El presidente francés, Emmanuel Macron, solicitó este jueves en Beijing una gestión de su homólogo chino, Xi Jinping, para “hacer entrar a Rusia en razón” en el conflicto de Ucrania. La visita de Macron a China, enfocada también en establecer lazos comerciales, consistió en empezar a hablar de negociaciones de paz “lo antes posible”.

Macron llegó el miércoles a China para una visita de tres días, y dijo claramente que su objetivo es disuadir a Beijing de apoyar la invasión rusa de Ucrania, iniciada en febrero de 2022.

“Sé que puedo contar con usted para hacer entrar a Rusia en razón y llevar a todo el mundo a la mesa de negociaciones”, afirmó el mandatario francés durante un encuentro bilateral con Xi.

En una declaración conjunta a la prensa, los dos líderes reafirmaron su llamamiento a unas conversaciones de paz entre Kiev y Moscú “lo antes posible”. Ambos reafirmaron también su oposición al uso de armas nucleares en la contienda.

“No pueden usarse armas nucleares”, dijo el presidente chino, quien condenó los ataques a civiles y cualquier “uso de armas biológicas y químicas”.

Moscú descarta una mediación

El Kremlin sin embargo enfrió la situación al descartar la posibilidad de una mediación china pese a la relación estratégica entre ambas potencias.

“Claro que China dispone de un potencial formidable y eficaz en cuanto a sus servicios de mediación”, dijo a la prensa en Moscú el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.

“Pero la situación con Ucrania es compleja, y por el momento no hay una perspectiva de solución política”, de forma que “no tenemos otra solución que seguir con la operación especial”, agregó. Vale la pena recordar que para el Kremlin, la guerra que se libra en el oriente de Ucrania es catalogada como una “operación militar especial” que consiste en liberar ciudadanos prorrusos de las ambiciones de Kiev, algo que ha sido criticado por varios países de Occidente.

Tras las declaraciones a la prensa, Macron y Xi iniciaron una reunión con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.

“Contamos con China para no entregar equipos militares a Rusia, directa o indirectamente, porque sabemos todos que armar al agresor iría en contra de las leyes internacionales y dañaría considerablemente nuestra relación”, dijo la jefa del brazo ejecutivo de la Unión Europea.

Von der Leyen considera que la postura china sobre la guerra será un “factor determinante” en el futuro de su relación con la Unión Europea.

Un diplomático francés que asistió a la reunión, precisó que Macron también pidió a Xi que no entregara “nada a Rusia que pueda ser usado en su guerra contra Ucrania”.

En las últimas semanas aumentó la presión internacional para que China, aliado estratégico de Rusia, se implique en resolver el conflicto.

El gigante asiático y la UE deben “persistir en el diálogo y la cooperación”, aseveró Xi, que añadió que China está “lista” para trabajar con la UE para poner sus relaciones “en la dirección correcta”.

Asimismo, el mandatario chino recalcó la disposición de su país a “revitalizar la cooperación mutuamente beneficiosa” y a “reanudar los intercambios a todos los niveles” con la UE, tras casi tres años en los que las fronteras del país asiático permanecieron prácticamente cerradas a causa de la política de ‘cero covid’, ya desmantelada.

El líder chino declaró que Beijing y Bruselas deben trabajar para “superar los desafíos” y para “dotar de un nuevo ímpetu a sus relaciones” y a “la paz global, la estabilidad y la prosperidad”.

Aunque Beijing se declara oficialmente neutro, no ha condenado la invasión ni Xi Jinping ha hablado con el presidente ucraniano Volodimir Zelenski. El mandatario chino declaró que lo iba a hacer cuando llegara el momento, según el diplomático francés.

Xi viajó a Moscú en marzo para reunirse con su homólogo ruso Vladimir Putin, a quien presentó un documento publicado en febrero para una solución política en 12 puntos.

Contexto regional tenso

“Del lado chino, lo que tenemos de momento son declaraciones absolutamente clásicas”, dijo el analista Antoine Bondaz, de la Fundación francesa para la Investigación Estratégica.

“Está claro que China no se ha movido. El objetivo es que China haga lo que dice, lo cual no es el caso de momento”, abundó.

La visita de Macron y Von der Leyen coincide con un nuevo periodo de tensión alrededor de Taiwán tras el encuentro en California entre la presidenta de la isla, Tsai Ing-wen, y el presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Kevin McCarthy.

El jueves, Beijing prometió “medidas firmes” ante esta reunión y la isla de gobierno autónomo anunció la detección de tres navíos de guerra y un helicóptero antisubmarinos chino en sus cercanías.

China considera Taiwán como parte de su territorio y está dispuesta a retomar su control, incluso por la fuerza. Sus autoridades rechazan cualquier contacto entre las autoridades de la isla con otros países.