La tragedia se cruzó en el camino del humilde club Chapecoense cuando iba a disputar el partido más importante de su historia: la final de la Copa Sudamericana contra Atlético Nacional. Ante la muerte de 76 de las personas que iban en el avión, rumbo a Medellín, es claro que la disputa del trofeo internacional pasa a un segundo plano. Sin embargo, una pregunta persiste: ¿Quién será declarado como campeón?

La decisión está en manos de la Conmebol, el ente rector del fútbol sudamericano. Por ahora, hay incertidumbre sobre cómo se designará al campeón, pues no hay antecedentes de un hecho similar en la disputa del torneo, y tampoco hay consideraciones al respecto en el reglamento de la Copa Sudamericana.

Hasta ahora todo es especulación. Se habla también de que ambos finalistas deberían compartir el título del certamen, en su edición del 2016. Asimismo, se ha puesto sobre la mesa la alternativa de que la Conmebol espere al menos un semestre para que el club se rearme y puede afrontar esta final.

Hay compromisos que podrían incidir en esta decisión. La Conmebol, por ejemplo, tiene que mandar a un representante sudamericano a la Copa Suruga Bank, que se disputa en Japón, entre el campeón de la Sudamericana y el ganador de la liga de ese país asiático. La Conmebol tendrá que decidir.