«Poco a poco acabas aceptando el viejo cliché de: Si quieres a alguien, tienes que dejarla ir. Ahora comprendo qué significa después de experimentarlo en primera persona«. Esto fue lo que dijo Brad Pitt en la entrevista que ofreció a la revista GQ, la primera que hacía tras su separación con Angelina Jolie.

En el reportaje para la publicación el actor admitió sus problemas con el alcohol y las drogas, algunas de las razones que citó Jolie cuando pidió el divorcio el año pasado.

«Cuando formé mi familia detuve todo excepto el alcohol. Incluso este último año estaba bebiendo demasiado. Se había convertido en un problema», dice. Pero eso no era algo que no se supiera, pues cuando Jolie solicitó el divorcio en septiembre pasado alegó diferencias irreconciliables, problemas de ira y consumo de alcohol y marihuana. Pero ahora, el actor está dispuesto a pasar la página y seguir adelante con su vida y su carrera.

Parece que Brad Pitt hizo las cosas bien. Se quedó callado durante el escándalo mediático, dejó que se le pasara la rabia a su esposa y cuando las cosas estaban más calmadas ofreció una entrevista en donde admitía su responsabilidad en la mala situación familiar que vivía la pareja que hasta entonces era ejemplo en Hollywood.

Meses antes Angelina Jolie ya había dejado claro que a pesar de todo, ella, el actor y los seis hijos que tienen en común seguían siendo una familia. «Somos una familia y siempre seremos una familia, pasaremos por este momento y esperemos ser una familia más fuerte por ello».

Pues bien, parece que ahora se calmaron los ánimos, ‘Brangelina‘, como se le conoce a la pareja, se puso de acuerdo para parar el proceso de divorcio. Esta semana Us Weekly publicó una información ofrecida por un amigo de la actriz, quien supuestamente está dispuesta a darle una nueva oportunidad al actor.

«Todos creen que ellos se van a reconciliar (…) No sería sorprendente si ellos anunciaran que están cancelando la separación y que tratan de arreglar las cosas», dijo el informante.
Otro medio de comunicación, el Daily Mail, informó que «el proceso de divorcio se ha hecho significativamente lento pero no ha habido un cambio real».

En todo el proceso, tanto Angelina Jolie como Brad Pitt dijeron que se esforzaban por tener la mejor relación el uno con el otro por el bien de sus hijos Maddox (15 años), Pax (13 años), Zahara (12 años), Shiloh (11 años), y los gemelos Vivienne y Knox (9 años).

Eso por eso que el actor no es el único que se ha esforzado en cambiar. En la última entrevista que ofreció la artista a Vanity Fair, comentó que ahora mismo «solo quiero hacer un buen desayuno y ocuparme de la casa. Esa es mi pasión. Por pedido de mis hijos, tomo cursos de cocina. Cuando voy a acostarme por la noche, me pregunto: ¿Hice un buen trabajo como madre o fue un día normal?«.