Para los medios, los cuidadores son una presencia constante. Ellos traducen, les dicen a los periodistas dónde pueden o no pueden ir, e imparten la línea oficial sobre todo, desde las relaciones con Estados Unidos hasta la forma apropiada de aludir a líderes del régimen. Algunas de estas recomendaciones son bastante irritantes:

Cómo llamar al país

Corea del Norte no es Corea del Norte. Es, más bien, la República Democrática Popular de Corea del Norte, RDPCN. Por completo desubicada es la expresión “el reino ermitaño”, los cuidadores dicen que la frase les resulta profundamente insultante.

Cómo dirigirse a los líderes

Corea del Norte tiene un gobierno, pero solo tres personas importan realmente, y dos de ellas han muerto. Kim Il Sung, que fundó el país y murió en 1994, a menudo es llamado “presidente eterno” o “gran general”. Su hijo Kim Jong Il es «presidente» o «querido líder». Kim Jong Un, que asumió el poder al morir su padre a fines de 2011, puede ser llamado «líder supremo» o «querido respetado”.

Esos prendedores de Kim

Todos los norcoreanos usan un prendedor sobre el lado izquierdo del pecho con la cara de Kim Il Sung o Kim Jong Il – o ambas–. Los extranjeros no pueden comprar prendedores. El más común es una brillante bandera roja con los retratos de ambos líderes.Pero no hay que llamarlos prendedores ni pins. Estas palabras socavan su importancia. Como dijo un cuidador tras consultar software de traducción en su teléfono, son «insignias».

Estados Unidos

Mencionar a Estados Unidos puede dar por resultado una larga conferencia. No hay tal cosa como relaciones con Estados Unidos, solo “la hostil política de Estados Unidos».

Preguntas difíciles

La respuesta frecuente de un cuidador a una pregunta es: «Esa es una pregunta difícil». Entre las preguntas difíciles está: “¿Por qué no se me permite salir solo del hotel?” Respuesta: “Los malos sentimientos de la gente con respecto a Estados Unidos están exacerbados y tal vez no pueda protegerte».

Cigarrillos

Por más que exaltan las políticas de autosuficiencia de su país y la calidad de los bienes fabricados en él, algunos cuidadores tienen gustos exigentes. Los periodistas a quienes les dijeron que llevaron cigarrillos de regalo a sus cuidadores cometieron el error de comprar Marlboro Reds fabricados en China. “Estos son cigarrillos chinos libres de impuestos”, dijo un cuidador rechazándolos.

Cuando un cuidador no es un cuidador

“La tarea del cuidador es esconder la embarazosa cara interna de la sociedad norcoreana de los ojos de los forasteros”, dijo Ahn Chan Il, un desertor norcoreano que encabeza el Instituto Mundial para Estudios sobre Corea del Norte, con sede en Seúl.

Y el equipo que recibió a los periodistas en el aeropuerto ni siquiera quiso que los llamaran cuidadores. «Yo no te estoy cuidando», dijo uno. «Nosotros los guiamos. Por favor, llámame guía».