La posible presencia de deportistas rusos y bielorrusos dentro de un año en los Juegos Olímpicos de París genera numerosos interrogantes, principalmente por una eventual cohabitación con los ucranianos durante la competición.

La historia tiene varios precedentes. Acoger a naciones en conflicto durante los Juegos Olímpicos “es algo que ya pasó varias veces y los organizadores lo han sabido gestionar en cada ocasión”, asegura un miembro de la Comisión de Atletas del Comité de Organización de los Juegos de París (COJO), bajo cobertura de anonimato.

“Desde hace años, naciones que no son amigas cohabitan el espacio de una competición como los Juegos Olímpicos. Si a los rusos se les autoriza a competir bajo bandera neutral, no estaremos ante algo desconocido”, confirma esta fuente cercana al COJO.

“Es además el espíritu olímpico, que todos los deportistas puedan participar en los Juegos Olímpicos y cohabitar”, recuerda esta fuente.

Países como Irán e Irak, en conflicto armado durante casi ocho años (1980-1988) participaron en dos Juegos Olímpicos en aquel periodo. Irán y Estados Unidos también se ha cruzado regularmente en los Juegos.

Las cohabitaciones de deportistas de naciones en guerra o con fuertes tensiones han dado en raras ocasiones lugar a incidentes en la historia olímpica. En el torneo de judo de Rio-2016, por ejemplo, el egipcio Islam El Shehaby rechazó estrechar la mano de su vencedor, el israelí Or Sasson. Mientras que en Tokio en 2021, un judoka argelino se retiró de la competición para no tener que enfrentarse a un israelí.

“No recuerdo una pelea en el restaurante de atletas, o en la Villa, o en las sedes de las competiciones. Existe de verdad esa idea de la tregua durante los Juegos Olímpicos. Los atletas vienen aquí a celebrar el deporte”, explica una fuente cercana a las instancias deportivas.

¿Podrán participar los rusos en los Juegos Olímpicos?

El COI aún no ha tomado la decisión sobre la participación de rusos y bielorrussos en los Juegos Olímpicos de París-2024. Después de haber excluido a los dos países del deporte mundial tras la invasión de Ucrania en febrero de 2022, la instancia olímpica recomendó a las federaciones internacionales la reintegración bajo condiciones de los deportistas de ambos países, siempre que no “hubieran apoyado activamente” la guerra.

La decisión de reintegrar a los atletas de Rusia es considerada inaceptable por las autoridades ucranianas, que amenazan con boicotear los Juegos de París. “Es ante todo una postura política, de lobbying”, estima Lukas Aubin, geopolítico del deporte.

Desde la recomendación del COI, algunas federaciones han optado por la reintegración. El presidente del COI, Thomas Bach, pone a menudo de ejemplo el tenis como lugar donde pueden competir deportistas ucranianos, rusos y bielorrusos.

“A él le interesa decirlo, pero en realidad lo que hemos visto sobre todo en el tenis no es algo tan fluido”, puntualiza Lukas Aubin.

En el marco de los Juegos Olímpicos, un evento concentrado de manera intensiva en poco más de un par de semanas, el contexto sería diferente. Para Aubin, si el COI decide la reintegración y la situación militar no ha variado, “eso podría ser percibido como un insulto por Ucrania”.

“Concretamente, creo que habrá una separación física de las naciones en la Villa. Lo hemos visto en el tenis, la cohabitación es posible, pero no se desarrolla forzosamente bien en los vestuarios”, añade Lukas Aubin.

Aunque expertos y actores del movimiento olímpico creen que el COI apurará su decisión lo máximo posible, quizá hasta la primavera boreal de 2024, el tiempo apremia para los deportistas afectados, ya que las clasificaciones han comenzado en la mayoría de las disciplinas presentes en los Juegos de París.

Escalada y gimnasia reintegrarán por su parte a los deportistas de ambos países “en 2024″, privándoles así de las pruebas clasificatorias para los Juegos en 2022 y 2023, para dejarles únicamente los últimos boletos, que se distribuirán el año que viene.

Por último, las dos disciplinas reinas de los Juegos de verano, natación y atletismo, mantienen por el momento la exclusión. Como rusos y bielorrusos están también privados de los deportes de equipo y de las pruebas no individuales, y que muchos de sus deportistas de élite tienen contrato con el ejército, su eventual presencia en los Juegos de la capital francesa se anuncia en todo caso muy limitada.

Los organizadores en París se preparan para los Olímpicos

Ese escenario de una cohabitación en la Villa durante las competiciones, o incluso en los podios durante París-2024, es algo que los organizadores contemplan y pretenden preparar.

“Nosotros, el Comité de Organización, debemos acoger a los deportistas que estén clasificados y confirmados por el COI y el IPC (Comité Paralímpico Internacional)”, recordó el patrón del Comité de Organización, Tony Estranguet.

“Nuestro objetivo es que los deportistas estén seguros. Evidentemente, nos fijaremos en esos asuntos con mucha atención”, asegura el expiragüista tres veces campeón olímpico.

“Los retos sobre la seguridad de los deportistas son la prioridad absoluta, así que serán tenidos en cuenta (…) Una vez que se tome la decisión, nos preocuparemos por que el dispositivo de seguridad se ajuste bien a las delegaciones”.