Las ventas de armas están aumentando en Estados Unidos tras la matanza en un cine de Colorado, pues los compradores temen que los políticos opuestos a la portación de armamento aprovechen la masacre para buscar restricciones.

En Colorado, el escenario de la matanza del viernes que dejó 12 muertos y decenas de heridos, las ventas de armas subieron en los tres días siguientes al incidente. El estado aprobó controles de antecedentes personales de 2.887 personas que quisieron comprar armas de fuego, un 25% más que cualquier período promedio del viernes al domingo en 2012 y 43% más que en el mismo intervalo la semana anterior.

Las ventas de armas fluctúan día a día, pero las cifras también se ven elevadas también fuera de Colorado.

El condado King, que abarca la ciudad de Seattle, vio casi el doble de solicitudes para licencias de portación de pistolas escondidas que en el mismo período hace un año. Florida registró 2.386 controles de antecedentes personales el viernes, un 14% más que en la semana anterior. Las ventas de armas en Oregón el viernes y sábado fueron 11% más que en el mes anterior. En California, los controles de antecedentes durante cuatro días se efectuaron 10% más que en el mes anterior.

Durante la década pasada, junio y julio han sido los meses más flojos para las ventas de armas, según datos del FBI.

Las autoridades han dicho que el detenido por la matanza, James Holmes, fue acumulando metódicamente armas y explosivos en los últimos meses. Compró una gran cantidad de municiones y una escopeta, un fusil semiautomático y dos pistolas Glock, dijeron las autoridades.

El viernes irrumpió en la función de medianoche del estreno de la nueva cinta de Batman, «The Dark Knight Rises», lanzó granadas de gas y baleó a los espectadores. Doce personas murieron y docenas resultaron heridas.

La policía en el suburbio de Aurora dijo que Holmes también colocó explosivos en su departamento. El individuo está en una celda local.